En 1462, los portugueses exploran las islas Bissagos. La bautizan con el nombre de Sierra Leona.
En 1469, para financiar la exploración, se alquila por cinco años la explotación de la costa a un señor portugués, Fernando Gomes, que a cambio se conprometía a prolongar la exploración cien lenguas por año y a devolver al rey, al cabo de los conco años, las costas exploradas.
En 1471, las gentes de Fernando Gomes llegan a un punto(en la costa de actual Ghana) donde encuentran las huellas de la implantación francesa.En 1482, se instalan en la Mina, rebautizada el Mina. Construyen una fortaleza sobre el mismo emplazamiento que sus prodecesores. Los portugueses han llegado al país de las minas de oro. No es, por otra parte, el fabuloso Bambuk situado más al interior. Se trata de otras minas, más cerca de la costa puestas en explotación por los negros del país. Parece ser que la población estaba hasta entonces muy dispersa en esta parte de la costa, que no presentaba ningún atractivo particular.
En 1472, Fernão do Po descubre la isla a la cual da su nombre y un río en cuya desembocadura puluran los camarones. El río de los camorones dará más tarde su nombre al Camerún.
Por primera vez los europeos franquean el Ecuador. La isla de São Tomé es colonizada y, a patir de 1485, se llevan a ella a los condenados a muerte, que allí tiene su la posobilidad de rehacer su existencia, y a patir de 1497, a los judíos que expulsa España de su territorio.
En 1482 Diego Cao, amigo de Enrique, descubre la desembocadura de un río muy caudaloso. Se entera de la existencia, a orillas de este río, de un vasto reino negro, el Congo. En 1485, en el transcurso de un segundo viaje, remonta el río con tres carabelas.
Pero esto no es lo que buscan los portugueses. La costa africanas no era un objetivo en sí. Ellos no buscaban allí más que aguadas, avituallamiento de hombres y navíos, con un único objetivo válido : la ruta de las indias.
En 1485, las carabelas de João d´Aveiros alcanza más de los 18° de latitud Sur, es decir, cabo Frío.
Batholomeo Diaz, conducido por su piloto Pedro d´Alemquer, domina un motín(su tripulación está compuesta en parte por condenados a muerte a quienes se les ha prometido el indulto) y dobla en 1488 un cabo donde sufre una tempestad, y al que llama por esto el cabo de las tormentas. Va más lejos, esta vez hasta tener la certidumbre de que la costa va en adelante de Oeste a Este, e incluso con tendencia a girar hacia el Norte. Y tras llegar a la desembocadura de un río(el great fish river) falto de víveres, da media vuelta, pero ya está convencido:el sur del continente africano ha sido alcanzado y transpasado.Al regreso de Batholomeo Diaz, el rey de portugal rebautiza el cabo de las tormentas y le confiere un nombre de mejor augurio:el cabo de Buena esperanza.