El Navegante Enrique y sus expediciones portugales

En el siglo XV y XVI, los portugueses es el vanguardia de la exploración europea en África, más extactamente a la costa de Áfica. Portugal puede llegar a India, esto no es sólo el éxtito de  Vasco da Gama, es un éxito de muchos portugueses que se habían esforzado en un siglo. En el proceso de exploración de casi un siglo, portugal también fundó un imperio comercial.

Enrique el Navegante

El primero que aplica al reconocimiento de las costas africanas el método y los medios necesarios es un príncipe portugués, el infante Enrique. Nacido en 1393, cuarto hijo de rey Juan I de portugal, este príncipe no reinó, lo cual le fovoreció para poderse dedicar mejor a su pasión por la navegación. Establece su residencia en Algarve, cerca de cabo San Vicente, en la punta estrema de sudoeste de Europa, cara al Atlántico. Allí, en su palacio de Sagres, colecciona todos los documentos de la navegación: portulanos, cartas marinas, relatos de técnica de la navegación, instrumentos de la navegación, compases y astrolabios. Hace venir al célebre cartógrafo mallorquín Jaume Ribes. Constituye astilleros. Durante la guerra con marruecos, encuentra a los judíos que allí residen y les oye hablar de Sahara, de las canavanas, del tráfico de marfil, de oro y de esclavos negros. Lo que atrae, más que el oro, es el desarrollo de saber. Pero sueña también con prolongar más allá de los mares el impulso de la Reconquista. Quere saber si tal como lo cuenta la leyenda de Preste Juan, existen en África príncipes cristianos que le podrían ayudar a luchar contra los moros. La misma Portugal no ha sido reconquistada hasta una época relativament reciente: el infiel no abandonó Lisboa hasta 1147. Ahora los portugueses quieren arrancarle Marruecos. A los ventidós años, Enrique participó en el ataque de Ceuta. Lo que sobre todo se trata de quitar a los moros es el monopolio de la ruta de las Indias.

Los moros sarracenos están sólidamente intalados en la cuenca mediterránea. Enrique concibe el plan de evitar las posiciones mediterráneas del mundo árabe, pasando por el Océano Atlántico. En una primera etapa tratan de asegurar escalas en las islas que hay a lo lago del litoral africano.

En 1420, Enrique envía una expedición para ocupar una isla, a la que se da el nombre de Madeira.

En 1425, otra expedición desembarca en Canarias, pero éstas ya están ocupadas por los españoles.

En 1431, una tercera expedición, descubre los Azores y las ocupa.

En 1434, alcanza el cabo Bojador.

la ruta de navegación

En 1441, el cabo Blanco.

En 1443, la isla de Gete, o sea, Arguin.

En 1445, los portugueses contruyen en Arguin una fortaleza y fundan un centro comercial. Se instaura así un comercio regular con los moros, se intercambia el trigo y las telas por cautivos negros y oro de Guinea. En el transcurso de estos descubrimientos, los portugueses es esfuerzan en capturar moros, sobre todo para hacerles hablar e informarse sobre el misterioso Continente.

Hacia 1444-1447, los portuguese alcanza el país de los negros y la costa Verde : el cabo Verde, la desembocadura del Senegal, la isla de Gorea.

En 1447, alcanza la desembocadura del Gambia y la costa, sembradas de islas, de lo que será Guinea portuguesa.

En 1456, navegantes italianos reclutados por Enrique exploran las islas del cabo Verde.

En 1460, muere Enrique; pero el impulso ya está dado y el país de oro está abierto a la navegación. El esfuezo, a la vez método y aventurero, va a dar sus frutos.

Incesante exploración y la llegada a cabo de buena esperanza

 En 1462, los portugueses exploran las islas Bissagos. La bautizan con el nombre de Sierra Leona.

En 1469, para financiar la exploración, se alquila por cinco años la explotación de la costa a un señor portugués, Fernando Gomes, que a cambio se conprometía a prolongar la exploración cien lenguas por año y a devolver al rey, al cabo de los conco años, las costas exploradas.

la ubicación de Ghana

En  1471, las gentes de Fernando Gomes llegan a un punto(en la costa de actual Ghana) donde encuentran las huellas de la implantación francesa.En 1482, se instalan en la Mina, rebautizada el Mina. Construyen una fortaleza sobre el mismo emplazamiento que sus prodecesores. Los portugueses han llegado al país de las minas de oro. No es, por otra parte,  el fabuloso Bambuk situado más al interior. Se trata de otras minas, más cerca de la costa puestas en explotación por los negros del país. Parece ser que la población estaba hasta entonces muy dispersa en esta parte de la costa, que no presentaba ningún atractivo particular.

En 1472, Fernão do Po descubre la isla a la cual da su nombre y un río en cuya desembocadura puluran los camarones. El río de los camorones dará más tarde su nombre al Camerún.

Por primera vez los europeos franquean el Ecuador. La isla de São Tomé es colonizada y, a patir de 1485, se llevan a ella a los condenados a muerte, que allí tiene su la posobilidad de rehacer su existencia, y a patir de 1497, a los judíos que expulsa España de su territorio.

En 1482 Diego Cao, amigo de Enrique, descubre la desembocadura de un río muy caudaloso. Se entera de la existencia, a orillas de este río, de un vasto reino negro, el Congo. En 1485, en el transcurso de un segundo viaje, remonta el río con tres carabelas.

Pero esto no es lo que buscan los portugueses. La costa africanas no era un objetivo en sí. Ellos no buscaban allí más que aguadas,  avituallamiento de hombres y navíos, con un único objetivo válido : la ruta de las indias.

En 1485, las carabelas de João d´Aveiros alcanza más de los 18° de latitud Sur, es decir, cabo Frío.

Batholomeo Diaz

Batholomeo Diaz, conducido por su piloto Pedro d´Alemquer, domina un motín(su tripulación está compuesta en parte por condenados a muerte a quienes se les ha prometido el indulto) y dobla en 1488 un cabo donde sufre una tempestad, y al que llama por esto el cabo de las tormentas. Va más lejos, esta vez hasta tener la certidumbre de que la costa va en adelante de Oeste a Este, e incluso con tendencia a girar hacia el Norte. Y tras llegar a la desembocadura de un río(el great fish river) falto de víveres, da media vuelta, pero ya está convencido:el sur del continente africano ha sido alcanzado y transpasado.Al regreso de Batholomeo Diaz, el rey de portugal rebautiza el cabo de las tormentas y le confiere un nombre de mejor augurio:el cabo de Buena esperanza.

la llegada a India y el logro de la supremacía marítima

 

Vasco de Gama,

en 1497-1498, Vasco de Gama, llevando como piloto al mismo Pedro d´Alemquer, parte de nuevo para el Cabo. Pero esta vez, sabiendo donde va, no sigue la costa para ganar tiempo. A patir de las islas del cabo verde va derecho, a través de Santa Elena, hacia el cabo de Buena Esperanza. Habiendo llegado más allá del Cabo, al punto extremo alcanzado por Batholomeo Diaz, en Navidad, Vasco de Gama llama a este país Natal;después continúa su ruta, esta vez navegando a toda vela hacia el nordeste. Toca Quelimane, Mozambique, Mombasa(donde hay mercaderes chinos) y Malindi. Encuentran allí puertos y navegantes árabes que le imforma de las condiciones de navegación en el Océana Indico. Recultando en el lugar a un piloto árabe, el 24 de abril de 1498 abandona la costa africana y pone proa hacia Calicut.

El 28 de agosto de 1499 el rey Manuel de portugal, enterado de que sus navíos, tras haber rodeado África, han arribado a calicut, da la noticia a Papa. Se proclama Señor de Guinea y de las conquistas, navegaciones y comercio de Etiopía, Arabia, Persia e India.

Egipto y Venecia se ven amenazada de perder su control sobre la ruta de las Indias. Reaccionan conjuntamente y antacan desde el mar Rojo a los navíos portugueses que trafican por el Océano Indico. Pero los portugueses derrotan a sus rivales en 1509 a lo largo de Diu y destruyen su flota. Durante un siglo, los portugueses serán los dueños del Océano Índico. Los turcos por su parte, se contentarán con impedirles el acceso al mar Rojo. En 1513, Alburquerque, el fundador de imperio colonial portugués, se apodera de Aden en Arabia. Los portugueses buscan el apoyo del rey cristiano de Abisinia contra los mulsumanes y trucos. Hemos visto que, a su vez, los abisinios habían acudido a los portugueses, que a patir de 1520 les prestaban auxilio, al principio puramente moral. los trucos proporcionan armas de fuego al Estado mulsumán de Adal, en la costa somalí; los portugueses llegan con el tiempo  justo para proporcionárselas también a los abisinios y restablecer el equilibrio entre cristianos y mulsumanes.

El carácter de las expediciones portuguesas

Ante todo es necesario decir que África sólo les interesa accesoriamente como escala en la ruta de las Indias; es en las Indias donde están las verdaderas fuentes de riqueza. Su exploraciones tienen un triple objetivo: económico, religioso, y político.

Los portugueses son los primeros europeos que franquearon el Ecuador y doblaron el continente africano por el sur, estableciendo la comunicación entre el Atlántico y el Océano Índico. La exploración de las costas, su inclusión en los mapas y las técnicas de navegación recibieron un impulso considerable en Europa Occidental, abriendo el camino a lo que se llama, desde el punto de vista europeo, el descubrimiento del globo, es decir, la puesta en contacto de los grupos humanos diseminados sobre el planeta y que hasta entonces se ignoraban recíprocamente. Los portugueses han abiero esta vía. Incluso se han llegado a suponer, con verosimilitud, que Cristóbal Colón era un agente secreto de Portugal encargado de desviar las ambiciones españolas hacia una dirección distinta de la ruta marítima de las Indias orientales por el Sur de África, esencial para los portugueses.

Para el estado portugués que envía estas expediciones, se trata menos de evangelización que de estregia política y comercial, es menos una cuestión de conquistar almas para la Verdadera Fe que de asegurarse bases y puntos de apoyo marítimos y militares através de este vasto movimiento, por el que desborda las posiciones de Islam. Este es el sentido de la embajada de Pedro da Convilha y de las misiones armadas a Etiopía; este será también el sentido de las misiones de conversión en el Congo.

Los portugueses no intentan conquistar los territorios. No quieren verdaderamente colonizar; desean solamente asegurarse bases para su red comercial: escalas en la ruta de las Indias y centros comerciales donde los indígenas llevan algunas mercancías locales, sin duda de valor, pero en cantidades demasiado pequeñas para remunerar la aventura. Por eso se esfuerzan fundamentalmente en ocupar las islas, de accesso y defensa más fáciles, donde se encuentran el agua fresca que los navíos necesitan y los frutos frescos para luchar contra el escorbuto. No podrán el pie en el continente africano más que en algunos puntos: sobre el Océano Atlántico, en el Mina, Costa de Oro y el Congo; sobre el Océano Atlántico, sustituirán durante algún tiempo a los navegantes árabes; pero ante las dificultades con que tropiezan no se empeñarán en matenerse. La política portuguesa en Africa es ensencialmente mercantil.

Los conflictos existían en el proceso

¿Cómo se lleva a cabo el avance de los portugueses? No se trata de una conquista, ni mucho menos de una ocupación. Sus contactos con las poblaciones locales varían según las circunstancias, siendo a menudo violentos. Cuando se considera la amplitud de la empresa, los riesgos corridos y la audacia de la que debieron hacer prueba los navegantes aventureros, se comprende que forzosamnete debían estar animados por una resolución casi demencial para seguir siempre adelante, lanzarse hacia lo desconocido y triunfar sobre los peligros imaginarios o reales. Los hombre enérgicos raramente son humanitarios. Es presiciso, por otra parte, tener en cuenta las costumbres de la época. Había una guerra permanente entre cristianos y mulsumanes, en la que se captura, se mascara y se rescatan rehenes recíprocamente con toda naturalidad y buena conciencia, puesto que cada uno tiene a su Dios consigo. El hermano de Enrique el Navegante, Fernando, el Príncipe Santo, cautivo de los árabes, fue torturado por ellos  con la esperanza de que  los portugueses les devolvieran Ceuta a cambio de él. Por su parte los portugueses, que dedican un considerable esfuerzo al descubrimiento de la ruta de las India, quieren también guardar para ellos el beneficio que se derivaría de ello. De la misma forma de que antaño los cartagineses, o más tarde los ingleses apartan a la concurrencia por los medios más eficaces e incluso los más rudos. Cuando tropiezan en 1586 con un gran navío de Dieppe llamando la Esperanza, lo hunden y matan parte de la tripilación, haciendo prisionera del resto, más grave aún: cuando alcanzan los puertos del Océano Índico, consideran al comercio árabe tradicional como una concurrencia que hay que eliminar. Vasco de Gama, al encontrarse en 1502 delante de Calicut una flota árabe cargada de arroz, tortura a los marineros y prende fuego a las naves. Almeida quema Kilua y Mombasa; Saldanha saquea Berberá; Soares destruye Zeila; d´Acunha somete a pillaje a Brava, matando o haciendo prisionero a sus habitantes y apoderándose de gran cantidad de oro, plata y mercancías. Además de botín, el beneficio de la operación es triple: enardecer a los marineros, liquidar la concurrencia y masacrar a los infieles. El resultado es que Zendj, aquella civilización original de la costa oriental, es practicamente aniquilada.

Tras el paso de los portugueses no queda más que ruina y desolación casi por todas partes. En 1583 no queda nada más que el puerto de Kilua, protegido por su situación insular, cuyas mujeres elegantes y hermosas, sus habitantes bien vestidos con algodón o seda, sus casas construídads con cal y arena y sus jardines perfumados serán descritos con admiración por el holandés Van Linschoten. Europa ignorará durante mucho tiempo que sus pioneros  habían encontrado en la costa oriental de África una civilización más refinada y más tolerante, y poblaciones más afortunadas y con costumbres más suaves que en el Algarve ibérico.

Por otra parte, el mismo contraste existía también entre esta civilización mercantil, más persa e hindú que árabe, donde el Islam había penetrado lentamente por vía de infiltración y culturalización, y las costumbres conquistadoras y esclavistas del Islam árabe en el África sahariana y sudanesa; un Islam fuertemente marcado, primero por los beduinos de la conquista y después por los turcos. Los portugueses no habían sabido apreciar la diferrencia: un infiel es un infiel, un competidor es un competidor y el oro es siempre bueno para apoderarse de él.