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Panama 2 Bocas del Toro

En bocas pasamos las mañanas visitando islas en lancha y por las noches de marcha dejando bien alto el pabellón español, el viernes a las doce acaba la ley seca y se monta un pifostio en la discoteca impresionante, es como si todo el mundo se hubiera vuelto loco, la abstinencia provoca sin duda el efecto contrario parece como si la gente llevase un años sin salir, yo no se de donde ha salido tanta gente, seguro que no falta nadie, un fieston increíble.

Estos tios son unos cachondos, el dj es dj chino, y es un chino, con un par. El sábado nos vamos a otra playa tan hermosa como la del día anterior, con aguas cristalinas y hermosa arena blanca, es lo que tiene el caribe, y por la noche, cuñao y yo salimos a tomar una cervecita porque estamos cansados de tanta marcha, empezamos en el barco hundido y acabamos en el aqualug  con las chicas, y cuando llego al aqualung ya veo peligro en la piscina en la que ya abundan los borrachos dándose un baño, es como una invitación tentadora.

Tomamos múltiples cervezas y cada vez que cuñao va a por una vuelve con un tequila de regalo, yo pierdo la cuenta de los tequilas y las cervezas, pero cuñao y yo estamos entregados y Yolanda, Lara e Indra parece que también, lógicamente unas horas después, estamos cuñao, Indra y yo en la piscina, después del chapuzón que no hace que se nos pase la borrachera, nos llueve todo el camino hasta el apartamento y entramos en varios charcos para medir la profundidad de los mismos, como no queremos despertar a Arancha que seguro que nos hecha la bronca a los dos, nos metemos en el apartamento de al lado el de Gerardo y Ana y a dormir la mona.

Al día siguiente me levanto con una resaca de espanto y me entero que mi hermana al levantarse y no veros se ha acercado al cuartelillo y ha puesto a la policía a buscar a dos turistas uno calvo con gafas y otro con el pelo rizado.

Pobrecita, que susto… con todo el resacón cogemos un taxi para ir a navegar de nuevo esta vez nuestro barquero es el de la entrada de la discoteca que ya nos conoce bastante bien a los dos. Al subir al taxi alguien intenta subir en parte del pick up y el taxista dice que todos en la parte de delante que hoy hay mucha policía…Yo le comento que es porque nos están buscando a cuñao y a mi. Volvemos a ver mas delfines y muchos peces, y sorpresa me encuentro cara a cara con una barracuda enorme, para compartir el miedo llamo a Yolanda y a Iñaki así tocamos a menos además Iñaki es de al lado de Bilbao.
Si ves un bicho solo da miedo, si lo ves con amigos compartes el miedo y si ataca a alguien cada uno piensa que atacara al de al lado y yo que se siempre es bueno tener a alguien de al lado de Bilbao para estos casos.

Llevamos cuatro días en Bocas y ya hemos discutido de fútbol con el presidente de la peña del Barsa, podíamos haber visto las señales, una sombrilla del barsa fuera, una pared de la tienda forrada de los colores del barsa, un reloj del barsa, pero con la resaca no vimos nada de eso y al sacar el tema del fútbol la cagamos.

Ahora cada vez que pasamos por ese trozo de calle se oye la canción del barsa y si el tipo no nos ha visto cuñao se pone a gritar Ala Madrid y enseguida se oye la replica, la gente mira extrañada sin entender nada.
Todavía tendremos tiempo para hacer un poco el cabra saltando encima de una palmera donde Arancha mi hermana se hará un esguince que cambiara el resto del viaje y a hacer submarinismo, snorkel. Hacemos surf cuñao y yo y el pobre casi se ahoga pero como yo voy sin gafas no veo nada y al final el lanchero y portero de discoteca Toni es el que le saca del agua, entre los dos no conseguimos tomar ni una ola.

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Panama 1 Frontera Bocas del Toro

Empieza el trayecto a la frontera y nuevo cambio de país, todavía no soy consciente de lo que me espera, enseguida me doy cuenta que he elegido el peor día del año para cruzar la frontera, el jueves santo o primer día de vacaciones aquí, todo el mundo ha decidido venir a Panamá de excursión.

La frontera de tica la cruzamos rápidamente pero cuando llegamos a la Panameña la cosa cambia, empiezan los chanchullos, lo primero los Panameños tienen miedo de que el país se les llene de inmigrantes y se les hunda, así que me obligan a comprar un billete de autobús de once dólares, interesante medida para impedir que se queden en su país, si decido quedarme perderé mi billete de once dólares, … Dios puede haber algo mas estupido, solo se me ocurre que entre tanto autobús vacío con todos los billetes vendidos alguien gane alguna comisión que seguro que es el caso.
De todos modos la chica que me vende el ticket me consuela me dice que tengo un año para utilizarlo, genial ya tengo una razón importante para volver a Centroamérica,… viajar en autobús de la frontera de Panamá a la Capital de Costa Rica.

En la cola de la frontera apenas hay gente, pero no avanza y llevamos ya dos horas al sol, yo al pasar de tres horas empiezo a perder los nervios, creo que porque tengo el cerebro recalentado. A las cuatro horas gracias a mis compañeras en la cola con las que después de cuatro horas juntos he entablado amistad, cogen mi pasaporte y pasamos todos juntos gracias a que Laura esta embarazada.

Las amigas de Mae son encantadoras y aparte de darle color a un día bastante gris, me guardaran la maleta y me invitaran a cenar hasta que consiga dólares.
Me bebo con ansia unas cuantas cervezas me como un sándwich y complementé todo con un par de margaritas y unos tequilas, mi cuerpo agradece rápidamente la hidratación y da grandes muestras de felicidad.

En Bocas del Toro consigo rápidamente habitación y nos vamos a tomar… como le dicen aquí al beber. A las doce entra en acción la ley seca así que hay que aprovechar el tiempo, la ley seca es por el tema religioso, yo como agnóstico declarado no entiendo nada, pero tampoco hay opción, la policía entra a las doce desalojando el barco hundido que es el sitio de marcha. Mientras pienso en el mal que ha hecho la religión por estos lares, uno de los Ticos me recuerda que la trajimos nosotros.

Me levanto temprano con una resaca espantosa, esta va a ser la tónica general en Bocas del Toro aunque yo eso todavía no lo se.

Cuando me sitúo en país y sitio empiezo a buscar habitación para todos y justo cuando encuentro un apartamento estupendo con piscinita aunque un poco alejado me encuentro a mi hermanita y a cuñao en medio de la calle en Bocas, la familia ya esta unida, así que dejamos las maletas y en dos horas ya estamos subidos en una lancha rumbo a Isla Zapatilla.
En nuestra lancha conocemos a unos ticos muy agradables con los que nos reímos todo el viaje, estos hacen que la ley seca quede olvidada rápidamente ya que llevan una nevera enorme repleta de cervezas, ron, vodka etc.
Nos invitan sin parar, por lo que la integración es rápida y las risas muchas, en el viaje vemos un montón de delfines y una preciosa isla que volveremos a ver, pero no con tanto alcohol en el cuerpo, es lo que tiene la ley seca.