Práctica 3

Comentario de Texto sobre el “Decreto de Valencia de Fernando VII”.

Decreto de Valencia, Fernando VII.

“Dado que la divina Providencia por medio de la renuncia espontánea y solemne de mi augusto padre me puso en el trono de mis mayores […] y desde aquel fausto día en que entré en la capital, en medio de las sinceras demostraciones de amor y lealtad con que el pueblo de Madrid salió a recibirme, imponiendo esta manifestación de su amor a mi real persona a las huestes francesas […]; desde aquel día, pues, puse en mi real ánimo para responder a tan leales sentimientos y satisfacer a las grandes obligaciones en que está un Rey con sus pueblos, dedicar todo mi tiempo al desempeño de tan augustas funciones, y a reparar los males a que pudo dar ocasión la perniciosa influencia de un valido durante el reinado anterior. […]

Pero la dura situación de las cosas y la perfidia de Buonaparte, de cuyos crueles efectos quise, pasando por Bayona, preservar a mi pueblo, apenas dieron lugar a más. Reunida allí la real familia, se cometió en toda ella, y señaladamente en mi persona, un atroz atentado […]; y violado, en lo más alto el sagrado derecho de gentes, fui privado de mi libertad y de hecho del gobierno de mis reinos. […]

Por tanto, habiendo oído lo que ecuánimemente me han informado personas respetables por su celo y conocimientos y lo que acerca de cuanto aquí se contiene se me ha expuesto en representaciones que de varias partes del reino se me han dirigido […] declaro que mi real ánimo es no solamente no jurar ni acceder a dicha Constitución ni a decreto alguno de las cortes generales y extraordinarias, y de las ordinarias actualmente abiertas […] sino a declarar aquella constitución y tales decretos nulos y de ningún valor y efecto, ahora ni en tiempo alguno, como si no hubiesen pasado jamás tales actos, y se quitasen de en medio del tiempo, y sin obligación en mis pueblos y súbditos, de cualquiera clase y condición, a cumplirlos ni guardarlos. […]”

 

 

El decreto de Valencia de Fernando VII se trata de un texto jurídico de índole política y claramente histórico. Su autor es Fernando VII, sin embargo el texto debió ser escrito por alguno de sus consejeros. Pese a esto debemos destacar que estamos antes una fuente primaria ya que se trata de un fragmento del Decreto en sí mismo y no de una reformulación posterior de éste.

Este texto firmado en 4 de mayo de 1808 es el decreto por el cual Fernando VII deroga la Constitución de Cádiz de 1812 y restaura el absolutismo monárquico.

Fernando VII, hijo de Carlos IV, ocupó el trono de la monarquía española en 1808 tras el Motín de Aranjuez. En este motín cayó el ministro Godoy y el rey Carlos IV abdicó a favor de su hijo Fernando. Napoleón, que ya había acordado por el Tratado de Fointenebleau, en 1807, la alianza con España, convocó a padre e hijo en Bayona y obligó al nuevo rey, Fernando VII, a devolver la corona a su padre, Carlos IV para que éste abdicara en favor de José Bonaparte (José I). Esta circunstancia forzó el exilio de la familia real en Francia mientras Napoleón invadía la península. En los años posteriores y con la entrada de Napoleón en España, se produjo el estallido de la Guerra de Independencia que se alargó hasta 1814 en que finalizó y por el tratado de Valençay Napoleón devolvió el trono a Fernando VII que retornó a España, donde restauró el absolutismo. Durante su ausencia tuvo lugar un movimiento liberal que llevó a la redacción de la Constitución de Cádiz en 1812, que instauraba un régimen monárquico constitucional.

 

 COMENTARIO

El Decreto fue escrito en Valencia que es el primer destino de Fernando VII una vez finalizada la guerra, aquí recibirá el Manifiesto de los Persas, que había sido redactado por un grupo de diputados absolutistas como muestra de apoyo al rey. El rey, redactó este decreto en un intento de estudiar los apoyos con que contaba para la restauración del poder absoluto antes de entrar en Madrid y, enfrentarse en las Cortes a los liberales. Por lo tanto podemos decir que éste, “El Decreto de Valencia” es el anuncio de las intenciones políticas de Fernando VII.

Las ideas principales que podemos extraer del texto son las siguientes:

La idea principal que da sentido a este decreto, y que en definitiva es la que motiva su redacción, es su decisión de volver al país a restaurar el absolutismo tras haber sido llamado a Bayona para renunciar al trono en favor de José Bonaparte y con él abolir la Constitución liberal de 1812 que se había promulgado en su ausencia.

En el primer párrafo encontramos la idea de que cuando Carlos IV, padre de Fernando VII renuncia al trono y se lo concede a él, su hijo, todo el pueblo de Madrid le recibe con entusiasmo y le jura lealtad “desde aquel fausto día en que entré en la capital, en medio de las sinceras demostraciones de amor y lealtad con que el pueblo de Madrid salió a recibirme”. Es en esta actitud en la que se apoya para fundamentar la necesidad de su vuelta al trono y el restablecimiento del absolutismo.

El pueblo ya había aclamado su entronización en un primer momento, y es por este mismo motivo que tras haber perdido el trono y haber sido invadida la península por las tropas de José Bonaparte, decide volver al país para recuperar su trono ya que el pueblo español le había jurado lealtad y le estaba demostrando apoyo (Manifiesto de los Persas) para que retornara y reestableciera el absolutismo. De esta manera al entrar en la península declara sin efectos la Constitución que había sido promulgada en su ausencia y elimina toda obligación que pudiera suponer ésta a su pueblo, como si no hubiera existido.

En definitiva, cuando Fernando VII vio apoyos suficientes en España a través del “Manifiesto de los Persas”, dictó este decreto del 4 de mayo en Valencia, primera ciudad a la que entró tras regresar del exilio en Francia, que anula y deja sin efecto las Cortes de Cádiz.

Esto da comienzo una etapa absolutista, produciéndose el restablecimiento del Antiguo Régimen, que además se produce en una situación internacional favorable ya que tras la derrota de Napoleón en el resto de Europa se pone en marcha la Restauración y se crea la Santa Alianza, que se compromete a defender y mantener los regímenes absolutistas y acabar con el liberalismo. Así se produce el restablecimiento del régimen señorial, de las antiguas instituciones como la Inquisición entre otras, se suprime la libertad de prensa, etc.

 

Como conclusión, se trata de un documento muy importante en la historia del siglo XIX español ya que nos muestra la pugna que existe a lo largo del siglo entre el liberalismo y el absolutismo y que principalmente comienza a darse a partir de este episodio. Este decreto supone la supresión de toda la obra legislativa de Cádiz, de carácter liberal, y la vuelta al absolutismo y la restauración de todos los elementos propios de las instituciones del Antiguo Régimen. Fernando VII fue monarca absoluto desde 1814 hasta 1833 con una breve etapa liberal durante el Trienio Liberal en que se le obligó a jurar la Constitución de 1812. No es hasta el reinado de su hija Isabel quien gobernará gracias a la Pragmática Sanción, que no se comienza a construir el Estado liberal en España.

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