Imágenes de la película ” Juana La Loca” ( 2001)
Juana de Castilla llegó a los Países Bajos el 8 de septiembre de 1496, pero Felipe el Hermoso no se encontraba en sus territorios cuando se produjo su llegada, ya que algunos meses antes había iniciado un viaje a la corte imperial para visitar a su padre. Algunos investigadores opinan que el archiduque había comenzado a cambiar de parecer con respecto a la conveniencia de contraer matrimonio con la infanta, ya que en ningún momento apresuró su retorno a sus Estados y no llegó a la villa de Lierre, donde se encontraba su futura esposa, hasta el 19 de octubre de 1496. Felipe III conoció a Juana de Castilla el 20 de octubre y según apuntan todas las crónicas, inmediatamente después se sintió profundamente atraído por ella, motivo por el cual ordenó a sus servidores que se adelantara la ceremonia religiosa para poder consumar inmediatamente el matrimonio. La boda tuvo lugar en la iglesia de San Gomaro, ese mismo día, tras lo cual comenzaron a celebrarse fiestas fastuosas en la corte, que no debieron prodigarse mucho, porque que el 26 de octubre estaba previsto que Felipe presidiera una asamblea de la Orden del Toisón de Oro, de la que era miembro desde su infancia. Tanto los biógrafos de Felipe de Borgoña como los de Juana de Castilla, coinciden a la hora de afirmar que ambos esposos sintieron un arrebato pasional nada más conocerse. Pero a pesar de este prometedor comienzo, parece que muy pronto aparecieron las primeras desavenencias entre ellos motivadas en la mayor parte de los casos por las diferencias que existían entre la corte española y la borgoñona.