Es difícil definir cuál es el punto exacto en donde empieza la época moderna, ya que en cada territorio comienza en determinado momento a causa de diferentes factores, tanto internos como externos.
Hay tres acontecimientos importantes que marcan el cambio de era. Uno es la caída de Constantinopla, en 1453, que supuso el fin del legado del Imperio Romano de Oriente. Otro acontecimiento fue el redescubrimiento de la imprenta por el alemán Johann Gutenberg siendo el primer impresor conocido de la obra llamada Biblia de las 42 líneas o de Mazarino, en 1450. Por último, otro acontecimiento que marcó el cambio fue el descubrimiento de América en 1492 por parte de Colón, dando a conocer un nuevo continente inexistente para la sociedad europea.
En cuanto al fin de dicho período se pueden atribuir dos sucesos importantes, como fueron la Revolución Americana (1775-83) y la Revolución Francesa (1789-99). A raíz de ellas se creó un Parlamento en el cual los ciudadanos podían decidir. Fue un cambio en la estructura política y social. La Revolución americana fue la primera que ocurrió, lo que la convierte en importante porque fue la precursora de las revoluciones posteriores, poniendo fin, sucesivamente, a las colonias europeas en el resto del mundo.