En El efecto Roger Bannister: ¿si ese experto puede, tú también? (El País, 22/03/2019):
Otra de las lecciones que se extrae de la hazaña de Bannister está relacionada con la falsa ilusión del aprendizaje por observación. Ver a alguien conseguirlo no es suficiente para que tú puedas hacerlo. A día de hoy, puedes encontrar casi cualquier habilidad que quieras aprender en internet. Los tutoriales de YouTube han servido a toda una generación para adquirir conocimiento de forma autodidacta. Sin embargo, no son tan útiles como parece. Ver a alguien hacer algo puede hacerte sentir que tú puedes realizar actividades similares, pero un nuevo estudio sugiere que el aprendizaje por observación puede ser ilusorio.
En seis experimentos, publicados recientemente en Psychological Science, los investigadores, de la Universidad de Chicago, llegaron a la conclusión de que las personas sobreestiman cuánto mejoran sus habilidades después de observar el desempeño de otros. Después de ver un vídeo de un bailarín explicando cómo se hace el moonwalk, te crees más capaz de hacerlo. Pero a la hora de la verdad, se te da igual de mal que si no lo hubieras visto. Los observadores mejoran su confianza, pero no su capacidad.
¿Qué es lo que hace que las personas estén tan confiadas? “Una cosa es memorizar qué pasos tienes que seguir y otra, experimentar cómo es llevarlos a cabo”, explica Michael Kardas, responsable del estudio. Todo el mundo sabe que para aprender hace falta practicar. Lo curioso de este estudio es el aumento de la confianza de los espectadores en sus propias capacidades después de ver un simple vídeo. “A menudo, se pierden las sutilezas mientras observan. Después de ver a los expertos, son propensos a subestimar la complejidad de la habilidad y sobreestimar sus propias habilidades”, asegura Kardas.
El estudio citado en este artículo es Easier Seen Than Done: Merely Watching Others Perform Can Foster an Illusion of Skill Acquisition.