Introducción.

Para empezar este trabajo es vital remontarse a la idea más básica, que es entender aunque sea brevemente qué es el Renacimiento. El período renacentista lo entendemos a partir de una serie de conceptos: por un lado, el surgimiento de la Reforma Protestante que lleva a un clima multirreligioso en Europa que hace perder poder al Papado. Esto lleva a su vez a un auge del poder civil que comienza su andadura por separado. Desde el punto de vista económico, toma fuerza como clase dominante la burguesía que accede a dicho poder, por lo que tenemos el poder civil en manos de mercaderes adinerados y con una visión filosófica que sustituye el modelo escolástico por el humanismo y el afán de conocimiento. Por lo que se genera el caldo de cultivo perfecto para el desarrollo de las ciencias y las artes, como veremos a continuación.

Tal como en el siglo XVI se da un auge en la ciencia política, desde la primera mitad del siglo XV se viene dando una renovación de los conocimientos científicos estudiados hasta la época. Esta renovación tiene unos antecedentes en la Edad Media ya que las tendencias que determinarán la ciencia en el siglo XVI vienen dándose desde los siglos XIV y XV. Causa del gran crecimiento de las tendencias que provocan todos estos cambios con la ciencia renacentista, es la caída de Constantinopla y el gran éxodo de científicos hacia Italia junto con una enorme cantidad de manuscritos científicos bizantinos, sumándole a esto la invención de la imprenta y con ella del libro, que permitiría una mayor y mejor difusión de todas las ramas del conocimiento y en especial de cinco saberes que tuvieron un ascenso considerable en cuanto a estudios y trabajos, las ramas que preponderan en esta etapa cultural son las matemáticas, astronomía, física, química y anatomía.

Otro elemento que influyó notablemente en el auge científico del Renacimiento fue el hito político en el cual el poder civil comenzó a ganar fuerza en contraposición de los poderes tradicionales como las instituciones religiosas, lo que permitió cierta autonomía a los investigadores (sin olvidar que la religión seguía siendo usado como elemento de control). Así, encontramos la aparición de figuras tan importantes y destacadas como Galileo, Copérnico, Leonardo Da Vinci, Maquiavelo o Kepler, entre otros.

En este trabajo vamos a exponer las características más relevantes de los campos científicos anteriormente mencionados tratando con ello de rendir homenaje a las personas que dedicaron su vida a asentar las bases de la investigación moderna y a las que podemos, con total seguridad, agradecer conocer el mundo tal y como lo conocemos actualmente y no tener una percepción arcaica de él.

Contexto histórico.

CONTEXTO HISTÓRICO

Iniciando el análisis del contexto histórico de la ciencia renacentista, en primer lugar hay que encuadrar este hito progresista en un nuevo plano entendido como una sociedad que avanza de una etapa de convulsión tanto social, como política y religiosa, a una dimensión que cuenta también con opresión por parte de las élites dominantes y sus monarcas, pero con un incremento de los derechos humanos y un auge descomunal en materias como arte, ciencia y conocimientos básicos generales.imagen contexto

 

El Renacimiento se entiende como un movimiento cultural que se produjo en la Europa Occidental entre los siglos XV y XVI, y es también conocido como un período de transición entre la Edad Media y el Mundo Moderno, el máximo exponente lo encontramos en el arte, pero como hemos mencionado anteriormente y en la materia que nos centramos, hay un incremento por el interés del estudio de las ciencias, tanto naturales como humanas. El Renacimiento tiene como punto de origen Florencia y a partir de ahí se irá extendiendo por el resto de Europa Occidental calando en gran parte de la población gracias a las ideas del Humanismo determinando una concepción completamente nueva del Hombre y del mundo junto a una percepción filosófica y ética donde se aprecia el valor del ser humano, tanto individual como colectivamente.

 

El Renacimiento se adscribe en una etapa de numerosos descubrimientos, tanto es así que coexiste con la denominada Era de los Descubrimientos donde encontramos tanto la expansión mundial de la cultura Europea con los viajes de los portugueses y su gran flota marina o con el descubrimiento de América por parte de los españoles, causas de la pérdida de visión teocéntrica que abarca toda la Edad Media. El proceso del Renacimiento comienza como tal en el siglo XIV pero con una fecha poco concreta, ya que tiene sus inicios en la Baja Edad Media donde se empiezan a difuminar los principios que provocarán este cambio en la sociedad y cultura.

 

Uno de los hitos más importantes que podemos hacer mención, es el desmembramiento de la cristiandad con el ascenso de la Reforma Protestante, y ésta acompañada con la invención de la imprenta para un conocimiento y una difusión mucho mejores que con las medidas que se contaba anteriormente. A nivel económico, lo más destacable es el retroceso de una economía feudalista perpetuada a lo largo de la Edad Media, por un progreso económico y social que llevaría a un desarrollo de uno de los primeros estados del capitalismo, el capitalismo mercantil. Paradójicamente, este progreso y renovación culturales busca sus ejemplos en la Antigüedad Clásica, un llamado renacimiento artístico que surgiría en Italia y se extendería rápidamente alrededor de toda Europa.

 

En cuanto al trato del tema de arte y cultura, el autor toma conciencia del individuo o colectivo con valor, por la postura humanista mencionada anteriormente. En una primera etapa encontramos el Quattrocento, el Renacimiento temprano que se desarrolla en Italia, caracterizado por la búsqueda de los cánones de belleza de la antigüedad y de las bases científicas del arte. En un segundo momento y encuadrado en el siglo XVI, dará origen al Cinquecento, caracterizada por una hegemonía artística de Roma que contaba con un apoyo ferviente del Papado de la época. Con las guerras en Italia, se dio un éxodo de artistas por el cual se difundió este nuevo período por toda Europa Occidental.

 

Ya en la segunda mitad del siglo XVI, comienza una decadencia para el Renacimiento explicada en un primer momento con un rígido formalismo, evolucionando al manierismo y tras éste, da comienzo el Barroco poniendo fin a este período de transición cultural y científica asentando las bases para un progreso posterior y un intento de modernización centrándose en la cultura clásica.