El siglo XVI supone el momento clásico por excelencia del Renacimiento. El primer tercio del Cinquecento supone el triunfo de la armonía y el equilibrio que se había adquirido durante el Quattrocento. Además, en este período, junto a la arquitectura religiosa se va a desarrollar la arquitectura urbanística y la arquitectura civil. La principal manifestación de la arquitectura civil es el palacio en las ciudades y la villa en el campo. Entre las características de la arquitectura clasicista renacentista del Cinquecento, podemos destacar que:
- Se inspira directamente en los modelos clásicos, buscando la armonía, el orden y la proporción.
- Hay una tendencia hacia el Purismo: ausencia de ornamentación.
- Opta por las plantas centralizadas con cúpula
En el segundo tercio del siglo XVI, se empieza a abandonar el equilibrio y la armonía de tendencia clásica, perdiendo el interés por la proporción y la serenidad, y centrando la atención en el decorativismo. Ello anuncia la crisis del Renacimiento y el inicio del manierismo que triunfará en Venecia. Con el desarrollo del Manierismo en el segundo tercio del siglo XVI, se produce la revisión interna y la difusión exterior de la arquitectura humanista del Cinquecento.
El Manierismo representa el talante de una época que colorea el lenguaje clásico y enriquece su vocabulario, invirtiendo deliberadamente las normas clásicas con el deseo revisionista de romper moldes y menoscabar la perfección clásica una vez alcanzada. Asimismo, el Manierismo replantea el problema de la escala como elemento arquitectónico, tanto en su concepción general como en su sistema de control tridimensional. Entre sus características destacamos:
- Los artistas de este período, dentro de la tendencia clasicista, se preocuparán de manera significativa por los efectos visuales.
- Rechazan las normas a favor de la libertad individual y de un concepto subjetivo de la belleza.
- Los conceptos de orden, armonía y proporción darán paso a la libre yuxtaposición de los elementos arquitectónicos. Se siguen empleando elementos clásicos(arco de medio punto, cúpulas, frontones, columnas clásicas,…) pero se combinan de forma caprichosa buscando la novedad.
Los principales arquitectos del Cinquecento son Bramante y Miguel Ángel, cuya producción se centra en Roma. En un segundo plano, estarían los arquitectos manieristas como Sansovino, Vignola y Andrea Palladio.
Bibliografía:
- ALONSO PERREIRA, José Ramón. “Introducción a la Historia de la Arquitectura: de los orígenes al siglo XXI”. Ed. Reverté, S.A. Barcelona. 2005. ISBN: 842912108.
- www.arteydibujo.com (En línea). Consulta: (28-11-2014).
- elartevivido.blogspot.com.es. (En línea). Consulta (28-11-2014).