Convocatoria de enero: ¿ y ahora qué ?

Las bibliotecas bullen de actividad, no se encuentra un hueco libre, los restaurantes también cuentan con mesas llenas de estudiantes repasando y es que la convocatoria de exámenes de enero está a en su punto álgido. Algunos resultados ya están disponibles y no son todo lo buenos que hubieras deseado. Y piensas ¿ qué puedo hacer ?

 

Este es el caso habitual de estudiantes de Química, Derecho, ADE, Matemáticas, Arquitectura, etc. etc. que por estas fechas se presentan a primera o segunda o tercera convocatoria de asignaturas y sienten que no avanzan, sino más bien que se atascan con ellas.

Antes de sacar conclusiones exageradas te diré que como estudiante has de tener ideas sanas, motivadoras y realistas sobre cómo te ves como estudiante y cómo regulas tu trabajo de estudiante.

Cómo te ves como estudiante

  • Quizá no te has parado a pensarlo pero ¿cómo te defines como estudiante? ¿sabes lo que hay que hacer en cada tarea en particular?
  • Cuando te das cuenta, ¿cómo manejas esas ideas?, ¿qué haces para ser buen estudiante?, ¿sabes técnicas de estudio?, ¿sabes planificar?
  • Cuando te pones a estudiar, ¿sabes qué estrategia conviene aplicar según la asignatura?

Cómo regulas tu trabajo de estudiante

  • ¿Realmente identificas y seleccionas las estrategias y recursos adecuados para abordar una asignatura concreta?
  • ¿Eres realmente consciente de lo que aprendes y lo aplicas?, ¿modificas alguna estrategia según los resultados?
  • ¿Evalúas tus resultados y los pasos que has seguido para conseguirlos?, ¿tus metas fueron realistas?

¿Cómo podemos ayudarte?

Revisa entradas anteriores del blog y autoevalúate a través de nuestros cuestionarios en línea (para estudiantes de la U.A.)

Conócete a ti mismo/a:

Regula tu trabajo

¡Queremos leer tu experiencia en los comentarios, aunque sea anónimamente!

Artículo redactado por Domingo Martínez, Psicólogo del CAE

Cuando los resultados de los exámenes de enero no son los esperados

La convocatoria de exámenes de enero está finalizando. Mientras se corrige y se publican los resultados, la espera comienza y nuestra inquietud va en aumento.

Es posible, incluso, que ya sepamos algunas notas, o que intuyamos el resultado.

Si no es positivo, quizá sea el momento de plantearte un cambio, de coger las riendas y espolear al pura sangre que llevas dentro para sacar lo mejor de ti mismo, en el segundo cuatrimestre.

Revisa todo lo que sabes sobre motivación por los estudios que cursas, el miedo al cambio (enlace externo) y la procrastinación, la planificación del estudio, lás técnicas de estudio propiamente dichas, la ansiedad, etc. y

¡Ponte manos a la obra!

Generalmente, el miedo al cambio nos atenaza hasta tal punto que preferimos seguir en el status quo, es decir, como siempre, antes que probar algo nuevo. En esa situación imaginamos, pensamos, que es una tarea faraónica, muy dura, como subir el Himalaya. En vez de analizar la situación y desmembrarla en partes asequibles, nos vemos en el final del trayecto, con falta de tiempo, agobiados por los plazos, trabajando mucho, enfrentándonos a temas desconocidos, desagradables, fracasando en fin … En vez de actuar como los alpinistas que se preparan subiendo cordilleras de 4000 y 8000 mts antes de preparar la ascensión al Everest.

¡Los pensamientos (preocupantes) nos juegan muchas veces malas pasadas, no dejes que sea ese tu caso!

¿Vas a hacer algo para que no se repita la historia?¿Para que no se cumpla tu profecía apocalíptica?

Déjanos tus comentarios sobre lo que piensas hacer, a continuación.

¡Adelante!

Artículo redactado por Domingo Martínez, Psicólogo del CAE

Cómo adquirir buenos hábitos de estudio en la universidad

Estás en la Universidad y las estrategias que empleabas en secundaria, seguramente no serán lo suficientemente efectivas ahora. Quizá el “empollar” la última semana te salve en algún momento, pero no es la mejor forma.

A continuación encontrarás algunas ideas para instaurar buenos hábitos de estudio que te garanticen el éxito.

  • Antes de entrar en clase, revisa los materiales que el profesor va a explicar ese día, o revisa el temario y haz una lectura exploratoria de algún libro que trate sobre esa parte antes de que empiece la clase.
  • Toma apuntes en clase, activamente. ¿Para qué quieres repetir lo que está escrito en los libros? Mejor toma nota de las claves que los profesores dan, de cómo resolver ciertos problemas, dónde encontrar las cosas, su opinión, sus críticas. Si se repite más de dos veces en clase, es posible que salga en los exámenes.
  • Para cada hora de clase se necesita dos o tres de repaso en casa. Estudia en casa al menos una hora antes de la siguiente clase.
  • Si te gusta hacer relaciones sociales, hazlas pero que sean primero de un grupo de compañeros para compartir apuntes y estudiar juntos. Os ayudaréis a aclarar dudas y estar al día. Si tus compañeros están en diferentes cursos, quedar semanas antes de los exámenes os ayudará a centraros más y motivaros para el estudio.
  • Date descansos a corto y largo plazo, después de estudiar toda la tarde, puedes salir una rato el viernes por la noche.
  • Si eres una persona a la que le cuesta mucho esfuerzo concentrarse y obtener resultados, trata de no sobrecargar el número de créditos en cada cuatrimestre.
  • Aprende las cosas importantes, como lo que se escribe en negrita, de los libros, aunque el profesor no lo comente en clase; puede que él piense que estás estudiando del libro.
  • Piensa que cada test que hagas en la universidad puede ser una prueba que más tarde tendrás en tu puesto de trabajo y quizá afecte a tu salario. Piensa en la aplicación práctica que tendrá en ese puesto de trabajo que tanto deseas.
  • Planifica tu tiempo. Estable un toque de queda por las noches y un toque de diana por las mañanas. Ten tiempo suficiente para descansar y para trabajar, en las vacaciones ya te lo podrás saltar.
  • Escoge bien las asignaturas que vas a estudiar para los exámenes finales.
  • Concéntrate mejor acudiendo a la biblioteca donde hay buen ambiente de trabajo. Aíslate del mundo, apaga el móvil y fíjate un objetivo claro para una hora seguida de trabajo antes del primer descanso.
  • Haz exámenes de ejemplo. El profesor u otros compañeros pueden facilitártelos. Consulta con tu profesor las dudas que te plantean.
  • Acude a las tutorías desde el principio de curso, no esperes a la semana previa de los exámenes, el profesor tendrá colas en la puerta de su despacho, estará cansado y hastiado de ver que sólo al final se acuerdan de él.
  • Date momentos de respiro, de relajación, de vez en cuando. Descansa algún fin de semana dando algún paseo, saliendo al campo, con los amigos.

La clave para afianzar cualquier hábito nuevo reside en intentarlo al principio con mucha constancia. Es difícil después de las vacaciones de verano, ya sé, pero por eso mismo, necesitamos poner el doble de esfuerzo, seguir un horario fijo para que después no nos cueste tanto.

No esperes a que las dos o tres hojas del comienzo se conviertan en un montón demasiado grande más adelante que te desmotive.