En esta época, la ciudad de Córdoba contaba con su famosa universidad y su biblioteca pública que contenía unos 400.000 libros. Existían 27 escuelas gratuitas para que los niños pobres aprendieran, por eso el nivel de alfabetización, tanto de los niños como de las niñas, era alto. También los jóvenes de la nobleza del norte de España venían a estudiar en la ciudad. Y las mujeres ricas de Francia encargaban sus trajes más elegantes gracias a la importancia del textil en la ciudad.
También esta ciudad andaluza sufrió de la rebelión de los moriscos. La muralla de la ciudad permitía separar la ciudad en dos partes, tenía una función defensiva tras la rebelión. Una vez pasado el conflicto varias puertas fueron construidas como la Puerta del Puente en 1575.
La Ciudad estaba adornada con cascadas, jardines y lago artificiales. Gracias a una serie de medidas, un acueducto administraba agua dulce en gran cantidad a las fuentes y los numerosos baños públicos.
El gran monumento del Córdoba que empezó a construir en el siglo XVI fue la Catedral, en el interior de la antigua Mezquita.