Este ejercicio es de narrativa. La única herramienta a disposición del alumno es la tipografía, es decir, el alfabeto en cualquiera de sus expresiones formales, letras, números y la contracaja completa.
Elisabet Sánchez Boix ha tumbado a la “i” añadiéndole tres “z” para representar a una persona realizando la acción de la palabra escogida.