EL MUNDO TRASHUMANTE VALENCIANO
Las vías pecuarias parecen un tanto descuidadas; sin márgenes definidos,
con anchuras que suelen sobrepasar las de otro tipo de caminos, trepando
por las zonas más agrestes de las montañas. Esta puede ser una primera
impresión de las vías de ganado cuando se desconoce la función económica
y paisajística que tuvo en el pasado y que todavía pueden tener.
sin embargo una gran confusión, ya que la costumbre en tierra valenciana
ha dejado una serie de denominaciones propias y diferentes a las
castellanas para los caminos trashumantes; “azagadores”, “lligallos”,
“pasos”, etc.
En el área valenciana, no hay unanimidad en cuanto a la designación de
nombres. Se impone una nomenclatura oficial establecida para el ámbito
nacional a finales de S. XVIII, y los nombres con los que se conocían
tradicionalmente estos caminos en esta tierra.
Legalmente son bienes públicos que desde el año 1995, se han reconocido
otros usos no pecuarios de estos viales; usos complementarios donde se
contempla su aprovechamiento para senderismo y ciclo turismo entre
otros, siempre que no entorpezcan la actividad pecuaria para la que
fueron concebidos. “Son rutas que han puesto en contacto a los pueblos
peninsulares desde muy antiguo y que más allá de su valor como ejes
viarios, tienen una riqueza cultural que debemos apreciar y conservar”.
En España tenemos una ventaja frente al resto de Europa y es que, mientras
allá necesitan altos presupuestos para trazar nuevas rutas por la creciente
afición al senderismo, aquí poseemos una red viaria de antiguos caminos,
y en concreto de caminos pecuarios, de miles de km., con lo que sólo hay
que hacer un esfuerzo de investigación y ahí están disponibles para nuestro
disfrute; como ejemplo, en la provincia de Valencia hay 4.113 km de vías
pecuarias.
Referencias bibliográficas:
CASQUEL, Teresa. GR-37: Vías Pecuarias: La Serranía. Valencia:
Centre Excursionista de València, 2003. 141 páginas. ISBN 8493311006
Valoración:
Hablamos de la valoración de las vías pecuarias de la comunidad
valenciana. Muchas se encuentran en un gran deterioro destacan las que no
poseen lindes ya que son más fáciles de penetrar ya sea por agricultores, u
otros. También os hacemos una breve referencia a las diferentes vías cuyo
criterio de diferenciación es la anchura de la calzada. En la comunidad
valenciana poseemos todavía un gran número de kilómetros de vías
pecuarias, 4.113 km. Que transcurren a los largo y ancho de las tres
provincias.