El año 2015 fue declarado por la ONU Año Internacional de la Luz y de las Tecnologías basadas en la Luz. Varias personas del Grupo Especializado de Mujeres en Física de la Real Sociedad Española de Física y de la Sociedad Española de Óptica llevamos a cabo distintas actividades para visibilizar a mujeres investigadoras que han realizado su labor científica en estos campos y cuya contribución científica es poco o nada conocida. En este trabajo presentamos nuestra experiencia y resultados de esta iniciativa singular, tanto a nivel nacional como internacional por tratar temas de género en la ciencia.
Tanto en el día a día de nuestra labor docente en distintas universidades españolas, como en nuestro trabajo de investigación en temas relacionados con la ciencia y las aplicaciones de la luz; somos conscientes de la gran brecha de género que todavía hoy en día persiste en la universidad en general y de manera particular y muy acusada, en las titulaciones científico-tecnológicas. Esta brecha de género se manifiesta, entre otras cosas, en los bajos porcentajes de chicas que optan por seguir estudios de ingeniería o de las llamadas “ciencias duras”. Son muchas y complejas las causas de esta situación pero se suele apuntar entre ellas a la falta de referentes femeninos en ciencia y tecnología que favorece la persistencia de estereotipos a la hora de elegir carrera. La ausencia de mujeres en los libros de texto en primaria y secundaria, contribuye a esta situación. Consideramos, por tanto, que es imprescindible llevar a cabo una labor de visibilización de las mujeres científicas, para crear referentes femeninos en los que puedan apoyarse las jóvenes estudiantes, que ayuden a corregir esta situación; pero también, para hacer justicia a estas mujeres brillantes y valientes que a pesar de muchas dificultades consiguieron llevar adelante su vocación científica. Fruto de esta motivación nace la Exposición “Investigadoras en la Luz y en las Tecnologías de la Luz”, que ha viajado por numerosas universidades y centros culturales desde su inauguración en el mes de septiembre de 2015 en la XI Reunión Nacional de Óptica celebrada en Salamanca. Con este artículo deseamos compartir esta experiencia y relatar cómo fuimos dando forma a este proyecto, desde su concepción y selección de las homenajeadas, pasando por el contenido y formato de la exposición, la búsqueda de patrocinadores y, finalmente, su difusión y el magnífico eco que ha recibido. Es indudable que dando visibilidad a la labor de estas científicas y reconociendo sus aportaciones en el avance de las tecnologías ópticas y fotónicas, muchas veces ocultas en el ámbito académico bajo el discurso de la neutralidad de la ciencia; estamos creando referentes para futuras científicas y tecnólogas y contribuyendo a la consecución de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres.
Las doce protagonistas
Gracias a la erudición de Gabrielle Émilie Le Tonnelier de Breteuil, más conocida como Madame de Châtelet y a su traducción de los “Principia Mathematica” al francés, la mecánica de Newton se difundió por todo el continente europeo. Martha Coston fue la primera en diseñar y fabricar un sistema de comunicación para los barcos basado en bengalas luminosas, contribuyendo con ello a salvar muchas vidas. Henrietta Swan Leavitt descubrió el camino para conocer el tamaño de nuestra galaxia y la escala del Universo. Hedwig Kohn realizó un minucioso trabajo en espectrometría y pirometría, hoy considerados estándares de iluminación. Katherine Burr Blodgett inventó los cristales antirreflejantes, mientras que Yvette Cauchois creó un espectrógrafo de rayos X que permitió descubrir nuevos elementos del sistema periódico. Maria Goppert Mayer, segunda mujer en la historia galardonada con el premio Nobel de física, dio nombre a la unidad de sección de absorción de dos fotones y Marie Luise Spaeth inventó el láser sintonizable de colorante y desarrolló los telémetros láser. Rosalind Franklin obtuvo mediante difracción de rayos X la famosa Fotografía 51, que probó experimentalmente la estructura helicoidal del ADN. Martha Jane Berghin Thomas mejoró las fuentes de iluminación, sobre todo bombillas y tubos fluorescentes y Jean MacPherson Bennet aportó ideas originales que son un referente en el estudio de las superficies ópticas. Por último, Jocelyn Bell Burnell descubrió los “faros” del universo, los púlsares.