Luis de Góngora y Argote, nacido en Córdoba en 1561, fue uno de los mejores poetas españoles del Siglo de Oro. Proveniente de una familia acomodada estudió en la Universidad de Salamanca y fue nombrado racionero en la catedral de Córdoba. Sus primeras composiciones seguían un estilo profano que le valieron una temprana amonestación del obispo, por lo que busco hacerse hueco en la Corte para intentar mejorar su situación económica. En esta época escribió sus mejores letrillas, ganandose la amistad de Pedro Espinosa, aunque a la vez, también la enemistad con Francico de Quevedo. E sus composiciones se aprecia una vena satírica y un estilo ligero y humorístico que, posteriormente, se unirá a un tono elegante y culto, como queda reflejado en la Fábula de Píramo y Tisbe. Posteriormente, entre 1612 y 1613, escribió sus dos grandes obras Soledades y Fábula de Polifemo y Galatea, donde reflejó perfectamente esta conjunción de estilos, aunque fue muy criticada. Sin embargo estas obras definen perfectamente ese estilo culterano barroco, que busca alcanzar la máxima belleza del lenguaje y esconder su propio significado, reservandolo para una minoría culta.