“Tierra y Libertad” (Ken Loach)

En primer lugar un breve resumen al respecto de la película “Tierra y Libertad”.

David, el protagonista, un joven comunista inglés, a través de sus contactos con el ILP (International Labor Party), se une a la lucha española en 1936 en las milicias del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista, marxistas heterodoxos que en la practica se aliaron con la CNT y la FAI) en contra de los fascismos que se estaban desarrollando en Europa en estos momentos.  

David, es un comunista desempleado de Liverpool que deja dicha ciudad para marchar a la guerra civil española. Una vez aquí se une al POUM y lucha en una sección donde hay tanto españoles como extranjeros de distintas nacionalidades.  Dicha brigada está convencida de luchar por la defensa de la libertad, por la igualdad entre las personas y el compartir tierra y bienes, sin existencia de clases sociales. Estos son los ideales que defienden, pero vamos a ver a lo largo del cortometraje como a veces el enemigo no solo está entre las filas del bando adversario.

David deja esta sección localizadas en las montañas de Aragón, para luchar con los estalinistas. Pero, cuando David se da cuenta, después de los sucesos de mayo de 1937 en Barcelona, que los estalinistas están traicionando a la revolución, vuelve con sus compañeros de la sección del POUM en las montañas de Aragón. Finalmente, cuando el POUM es declarado fuera de la ley, la milicia a la que pertenece David, es disuelta a la fuerza.

http://www.youtube.com/watch?v=9dXB-QXP-9I

¿Creéis que en Alemania sería imposible que volviera a haber una dictadura? Yo os demostraré que estáis equivocados (II) (La ola)

En la actualidad, ¿tienen las élites dominantes el mismo poder que en el siglo XX para controlar a la masa?

 Creo que el dominio es superior. La emergencia de medios de comunicación da un poder aún mayor a los poderosos para controlar a la masa. En el totalitarismo, el individuo desaparecía entre la masa para ser reeducado, pero ahora eso no es preciso porque la información nos es dada individualmente, persona a persona, en casa y es información manipulada.Con esa información se pueden generar opiniones preestablecidas, gustos determinados hacia un productos, que pienses o que no pienses, de que manera… Gracias a los medios de comunicación, dirigidos por el poder, la manipulación se sirve en casa,en la calle, en la escuela… y esta manipulación sirve para controlar a los individuos.

 ¿Cuál es la influencia del miedo a lo largo de la Historia?

El miedo es un arma que ha sido usada a lo largo de la historia para controlar y manipular a la sociedad. La gente actúa por convicciones, pero también actúa por miedo. Como se ha observado en todos los régimenes de corte dictatorial de la historia, el miedo es el arma más valiosa para mantener a una sociedad controlada. El miedo provoca falta de acción y la falta de acción provoca conformismo. Una sociedad conformista no supone un problema para el poder.

¿Consideras un riesgo histórico el escaso respeto que tienen los estados hacia la ONU?

Si, es un riesgo. La ONU debería ser usada como la mejor herramienta en la resolución de problemas y conflictos, así que, en teoría, debería suponer un riesgo histórico el no respetar sus decisiones. Digo en teoría, ya que el hecho de que 5 de los miembros de su Consejo de Seguridad, que realmente son el corazón de la ONU, sean permanentes y, no solo eso, sino que tengan derecho a veto, provoca que esos países estén más preocupados por defender sus intereses que por el interés general. Cuando la ONU dicta medidas para atajar un conflicto se hace siempre con el beneplácito de estas cinco naciones, con lo cual hay que descubrir en qué medida la resolución llevada a cabo en nombre del bien general es realmente así o busca sólo el beneficio de estas cinco naciones. 

¿Creéis que en Alemania sería imposible que volviera a haber una dictadura? Yo os demostraré que estáis equivocados (La ola)

A raíz de la visualización en una de las clases de Tendencias Historiográficas Actuales surgieron una serie de preguntas a debate muy interesantes, las cuales contesto de forma muy resumida en esta entrada.

¿Puede llegar a ser una ideología el motor principal de un proceso histórico?

A mi modo de ver sí. La ideología puede ser algo que convierta el descontento social u otros factores en un cambio, por lo tanto la ideología es perfectamente válida como motor de un proceso histórico. Esto ya se ha visto varias veces en la historia, donde una ideología ha abanderado un movimiento de descontento general que ha producido un cambio, un claro ejemplo para mí, sería la Revolución Rusa.

En el contexto histórico actual, ¿podría desarrollarse un movimiento totalitario similar al nazismo?

Creo que si, aunque espero que no se de. Si algo nos enseñó la guerra de Kosovo, por ejemplo, es que no aprendimos nada, o prácticamente nada, del nazismo, produciéndose de nuevo matanzas de civiles a las puertas de Europa. Hoy en día siguen habiendo, como  en conflictos como el árabo-israelí y, desgraciadamente, habrá siempre espantosos crímenes de inocentes. 

Con lo cual algo “similar” ya ocurrió. En un contexto de crisis como el actual es más fácil que se produzca un aumento del éxito de las ideologías más extremas (esto se está observando en Grecia actualmente) que abren la puerta a que, aunque en una probabilidad tal vez muy remota y por supuesto no deseada por nadie, puede repetirse una situación si bien no igual, parecida.

 ¿Crees posible la vuelta de la dictadura a España?

No hay que desdeñar ninguna posibilidad y tal vez sea posible, quizás no de la misma forma en la que se instauró la dictadura de Franco, ni con los mismos apelativos para llamar a esta.

No sería del mismo estilo que la iniciada por Francisco Franco, sería un ascenso dictatorial más gradual, desde la democracia, con medidas políticas y económicas que fueran minando los derechos de los ciudadanos lentamente y aumentado el poder del Estado frente a ellos.

En un horizonte cercano, no lo veo posible, pero, por ser posible, puede ser posible, pero no de una forma radical, tajante, mediante un golpe de Estado. Creo que nuestra sociedad ya está lo “suficientemente educada” como para rechazar una dictadura, pero no lo está lo suficiente para darse cuenta que sus derechos han sufrido una degradación gradual.

 ¿Es un problema histórico la radicalización de las ideologías?

Si. Toda ideología siempre tiene una ideología contraria, en mayor o menor medida. Cuando una de estas ideología inicia un proceso de radicalización, o parte de esa ideología se escinde en otra ideología más radical que la original, siempre se producirá un movimiento similar en la ideología contraria: una radicalización alimenta la otra. Utilizando, otra vez, el ejemplo de Grecia, no solamente partidos de extrema derecha han ganado en votos, sino también de la izquierda más radical (pero ni por asomo la mitad de radical que el partido de extrema derecha griego).

Adoctrinamiento juvenil

Respecto al alumnado en la película, se muestra a la mayoría del alumnado con falta de pensamiento crítico y sumiso al conjunto, un conjunto que llega a despersonalizar al individuo.  Intenta que se analice cómo en una sociedad democrática se podría llegar a transformar sin demasiado esfuerzo en una autocracia. No obstante, desde mi punto de vista es poco creíble cómo en cuestión de unos días se es capaz de cambiar casi por completo a un colegio entero, no sólo una clase, sino a personas ajenas al taller, pero sí alumnos del instituto.  Además de también resultarme paradójico, puesto que es un grupo de jóvenes quien es capaz de transformar un sistema político, pero a su vez, se ve como un generación puede ser fácilmente manipulable, vulnerable e influenciable.

 En la película se representan los diferentes tópicos de la juventud, puesto que está el pijo, el deportista, el radical, el que se deja arrastrar por las masas con intención de ser aceptado, el marginado…

 Hay varios aspectos al respecto de los alumnos que vamos a intentar desgranar a su debido tiempo y de forma ordenada.

 En primer lugar, para mi parecer, muestra a un grupo de jóvenes que se sienten solos, incomprendidos, sin motivación, sin ideales por los que luchar, con mucho egoísmo. Pretende forzar un diálogo entre los espectadores de las motivaciones de los jóvenes, ver que nuestra generación es la generación donde no se ha conseguido logro alguno. Una generación que no ha pasado hambre, no ha vivido una guerra, no ha tenido que luchar por la libertad, por lo que cree o simplemente por sobrevivir. Es por ello, que la clase estudiantil se muestra en su gran mayoría imparcial, despreocupada por todo, sin afán  o motivación por nada. Concretamente, en la película se ve al alumnado que muestra frustración, descontento por la situación escolar, las desigualdades sociales.

Hace reflexionar, además de las ideologías destructivas, como la juventud se aburre. Las drogas, el sexo, los botellones ya no son suficiente para dejar de sentirse solos. Necesitan aferrarse a algo que les permita creerse pertenecientes a un grupo, no obtener rechazos, no desigualdades entre los individuos… Es por ello que de forma acelerada (quizás algo excesivo) cala entre el alumnado. Por ejemplo, el típico marginado social siendo participe del grupo es respetado, visto como uno más en el grupo, es aceptado y para el marginado el grupo es su vía de aceptación, de sentirse involucrado con aquellas personas que antes “admiraba” en el sentido de que quería pertenecer a ellos, comportarse como ellos, ser popular (afán de protagonismo). Es  curioso como este personaje, si no recuerdo mal Tim, pasa a ser fiel defensor del movimiento, es su medio de estar integrado y no quiere que una vez conseguida dicha meta ello de desvanezca y junto con el movimiento él mismo vuelva de nuevo al olvido del resto de los compañeros.  Se involucra tanto que su final es trágico (podría hacerse un símil con el final de Hitler).

 Por otro lado, vemos otro tipo de alumnos que por su ideología se apuntan al taller de autarquía, pero son atraídos por las formas de impartir el taller contrario y por la influencia de sus compañeros al taller de la autocracia, a pesar de ser contrarios a dicha ideología. Por otra parte, algunos se apuntan al taller de autocracia por no dar clases con el veterano profesor, considerado como un aburrimiento a su hora de impartir clases. Sea cual fuere el motivo, se consigue crear un grupo que aparentemente era heterogéneo, con diferentes ideologías, a uno solo, un grupo homogéneo.  Nivelan las diferentes escalas sociales para ser todos iguales y se adecentan una imagen conjunta, un logo que les identifique… Crean una clase, un colectivo uniforme que crea un sujeto director, y hay sujeción al sujeto. También un reconocimiento mutuo de iguales entre los sujetos y el sujeto director. Se pasa a un posterior reconocimiento del sujeto por el mismo como sujeto director para aspirar finalmente a un reconocimiento mutuo entre los propios sujetos, entre los sujetos y el sujeto director y entre el sujeto director con el resto de sujetos. 

Se ha pasado de una lucha individual a una ayuda mutua, un cambio de organización de la clase. Se elimina toda individualidad. Crean un uniforme conjunto, una señal, un logo, un nombre… lo llevan a lo extremo y no sólo en clase, sino que dichos valores se extrapolan al resto de situaciones diarias. Un ejemplo es como el típico joven deportista, buen estudiante, formal, serio se convierte en el “líder” del grupo, claro está por debajo del profesor. Éste se encarga de organizar una obra de teatro y al adquirir poder llega a imponer los papeles a quienes él cree oportuno e intenta dejar claro, casi por la fuerza, de lo que quiere en la obra y aquéllo que no quiere que se haga.

Surge un movimiento contrario al de la ola, dentro del propio alumnado participe del taller. Concretamente la novia del “líder” juvenil del grupo se opone al movimiento y se ve como el movimiento censura toda opinión en su contra. Se discrimina a aquella persona no afín al movimiento. 

También veo una crítica a las formas repetitivas de impartir la clase al respecto de la Alemania Nazi, una crítica al sistema educativo en el que el profesor llega, imparte su clase magistral de la mejor forma posible, te cuenta su perspectiva de aquel proceso, hecho u/o acontecimiento y marcha sin más. Ante tal dinámica explicativa el alumnado se muestra ya cansado de que le sea de forma reiterativa explicada así la Historia.

 Otra crítica o más bien advertencia sería que no sólo hay peligro de establecer un tipo de ideología, sino que también es peligroso el adoctrinamiento juvenil.

La Ola (II)

En primer lugar, decir que la película desde el primer minuto intenta captar la atención del público adolescente. Prueba de ello es la utilización de una narración adecuada al lenguaje juvenil, música rockera, totalmente estridente para una persona mayor (salvo muy gratas excepciones), además de que salen tribus urbanas, grafitis,  el uso de internet…

Otro aspecto a destacar es que intenta transmitir la facilidad con la que podría germinar el totalitarismo en una sociedad en la que por una serie de factores es posible que resurgiera dicho fenómeno. Quizás es inverosímil el cambio tan radical, en una sola semana, de una forma de actuar a otra de estos alumnos, es por ello que cabría, quizás, hondar en los diferentes motivos que llevan a los alumnos a comportarse de tal forma, pero, a pesar de parecer descabellado sí se dio en la vida real en 1967 en un colegio de California.

A pesar de recalcar de nuevo que parece imposible que en algún país o estado se diese una vuelta al totalitarismo, no es al cien por cien inimaginable. Además del caso real de California, en la actualidad en la situación en la que se ve inmersa la gran mayoría de Europa, junto con la “gran superpotencia” (hasta hace relativamente poco tiempo) Estados Unidos, sí podría gestarse un sistema con dichos valores.  Cierto que el caldo de cultivo de la década de los 30 en adelante no es el de ahora, pero tampoco distan mucho ambas realidades. En el Tercer Reich, por ejemplo, las principales causas que desembocaron a un terrible caos, en el miedo que desencadenó o fue el aliciente necesario para la formación de los totalitarismos llevados hasta el extremo  fueron la falta de puestos de trabajo, la inflación, desocupación política, auge de los nacionalismos, etc. Hoy en día factores de gran peso serían aquellos ligados también a aspectos económicos, como políticos y otros, como por ejemplo, la falta de empleo, el aumento de la inflación, la crisis generalizada que afecta a un gran número de ámbitos de la sociedad.

En fin, no distan demasiado las situaciones, claro está que la sociedad ha avanzado lo suficiente como para no someterse de igual modo que en tiempos precedentes a una imposición de un sistema de estos caracteres. No obstante, en mi opinión, muy a pesar de estar en contra de que así suceda, sí podría darse un retorno a un movimiento totalitario, quizás no similar al nazismo, pero si que poco a poco se avance hacía una sociedad autocrática a través de recortes de una serie de derechos y libertades de forma gradual. Hemos estado presentes hace escasos días como partidos de ultraderecha se afianzan en países como Grecia. También, precisamente estamos ahora en España asistiendo a una serie de cambios (espeluznantes) que no podrían considerarse un retorno a pasos agigantados hacía una dictadura, pero quizás si a un sistema con similares características, pero con distinto nombre. Un apelativo “suave” que enmascarase la verdad de lo impuesto.

Ojalá recordase de donde leí esta frase: “En estos tiempos en los que el peligro de una sociedad que duerme en su individualidad pueda ser despertada por algunas bestias” esta película intenta plantear, sobre todo al público joven, como nada es imposible.

Para mi parecer pretende despertar al público, sobre todo adolescente, la inquietud por preguntarse sobre nuestro pasado, sobre los fascismos, sobre esa “obediencia extrema”, sobre si es posible una vuelta a totalitarismo.

“La Ola” (Dennis Gansel)

“LA OLA” es, en resumidas cuentas, una muy buena película que recomiendo y está basada en hechos reales.

La película tiene como escenario material (marco/ escenario) un colegio en el cual se realiza una semana cultural en la que los alumnos deben matricularse en una serie de talleres. Se ofertan dos talleres antagónicos entre sí, como son la autocracia y la autarquía. Concretamente un profesor con creencias anarquistas está dispuesto a impartir el taller sobre la autarquía, pero no le es posible al haberle sido asignado dicho taller a un veterano profesor, cuyas “pintas” no parecían casar demasiado con los conceptos iban a impartir sobre la autarquía. Encajaba más impartiendo el taller de autocracia, aunque temas a parte al respecto de las apariencias y los juicios superficiales por las formas de vestimenta, éste imparte dicho taller por lo que el otro profesor se ve obligado a impartir el taller de la autocracia en contra de sus principios, o lo que creía que eran en verdad sus principios.

Como se viene diciendo, el profesor se ve forzado a impartir un seminario sobre la autarquía y la dictadura, muy a su pesar al ser contrario a sus creencias. Que mejor para afirmarse uno en sus ideales que conocer desde dentro a aquello de lo que te opones. Es por ello, que al fin acepta (todo sea dicho, casi por obligación) llevar a cabo dicho taller, pero ante su disconformidad, el taller lo va perpetrar de forma muy peculiar.

Con el fin de explicar los significados, orígenes y demás conceptos en torno a dicha ideología establece como la presión de un grupo social potente puede desembocar en el fascismo y, para ello, recurre a un experimento con los propios alumnos, y en donde él también se ve inmiscuido.  El experimento al que recurre es crear una asociación partiendo de los “aspectos positivos” de dicha ideología. El problema, y el hilo de la película, será que lo que en un principio sólo iba a ser un trabajo dentro de unos talleres empieza a tomar vida y forma fuera de ellos.

En general, podíamos hablar de una película didáctica en la que el director  intenta que el espectador reflexione sobre la importancia de una ideología, sobre los fascismos, las tendencias autoritarias y demás aspectos.