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Crónica del primer curso de Hine Sensei en Palma de Mallorca

El puzle se va completando. Tras haber asistido a los cursos de Anno Sensei y de Ishimoto Sensei, me faltaba la tercera pieza importante: Kiichi Hine Sensei, el tercero de los alumnos directos de O Sensei que por suerte están activos en nuestra escuela.

Kiichi Hine Sensei

Yo ya le conocía personalmente pero no le había visto practicar (bueno, miento, vestido de calle nos hizo una demostración alucinante, aunque sin querer), e intuía que era una caja de sorpresas. Bien, este fin de semana hemos visto el interior de la caja por una rendija que él quiso dejar abierta, y el resultado es de absoluta perplejidad.

No voy a hablaros de su naturalidad, ni de su cercanía (me gustan los maestros que dejan a sus alumnos hacerles las técnicas que les enseñan), ni de su amabilidad, ni de que sepa inglés… no. Hine Sensei es mucho más que eso, es despliegue técnico + telepatía + anticipación + filosofía + capacidad de darte una torta y que parezca que has sido tú el que ha chocado con algo (dicho esto con conocimiento de causa) + coherencia + camaleonismo (a veces parece fuego, a veces tierra, aire o agua, según convenga) + … sin duda se trata de un gran maestro y sospecho que no va a ser la última vez que os cuente cosas de él.

Kiichi Hine Sensei

Lo que más me gustó, sin duda alguna, fue el rato que nos pidió que le preguntáramos lo que quisiéramos, allí nos transmitió varios conceptos que creo son claves para entender el Aikido de Kumano; en un momento dado nos puso dos ejemplos de lo que es Aikido y para qué es realmente, basados en su experiencia diaria como director de un asilo en Shingu. Allí, con cierta frecuencia, los ancianos que padecen demencia senil se ponen agresivos. Nos contó como Francia, la pareja de Quillen (un compañero de práctica que pasa largas temporadas en Shingu), es capaz de calmarlos y conseguir que vayan donde ella quiere sólo por la manera de tocarles y tratarles. La frase de Hine fue “eso es Aikido”. El segundo ejemplo le sitúa a Hine como protagonista, en una ocasión en la que uno de los ancianos agarró dos pequeñas guadañas que el jardinero había dejado en el suelo y comenzó a agitarlas en todas direcciones; llamaron al Sensei y éste se limitó a acercarse sosegadamente y pedirle por favor que le diera las herramientas. El anciano, desconcertado, no pudo sino hacer lo que le decía Hine con tanta amabilidad y seguridad.

Esta última anécdota conecta directamente con lo que nos contó Alfonso San (compañero riojano que vive y entrena en Shingu desde hace siete años), sobre cómo aterrizó en Japón con su maleta y su dinero, después de una experiencia vital dolorosa, con el corazón abierto a todo, sin avisar, sin expectativas y sin miedo “a morir”, y la de cosas maravillosas que le pasaron desde entonces. Después de mucho pensar, de conectar puntos y de asimilar sus palabras, pensé que esa actitud es la correcta ante una agresión de cualquier tipo (como Hine con el anciano de las guadañas) y me propuse utilizar el Aikido como una herramienta para alcanzar ese estado mental, esa actitud ante la vida. Recordad, amiguetes, se aprende tanto de los compañeros como del sensei…

aprendiendo-a-desenfundar

Tampoco me quiero olvidar de compartir con vosotros mi alegría por el pedazo de grupo que ha ido armando Diego Sensei con los años, el viernes batimos el récord de asistentes en el tatami de Dojo CAM, más de setenta personas en algo menos de 100 m2.

Curso de Hine Sensei en Dojo CAM

A continuación comparto con vosotros mis anotaciones de las técnicas que practicamos, perdonad si cambio alguna de sitio o se me olvida algo, pero para eso están los comentarios (están escritas a dedo en el teléfono en el vuelo de vuelta, si escribo alguna barbaridad es culpa de las turbulencias):
Viernes
Tai no henko
Katatedori nikio ura con terminación en ude garami
Katatedori kagami no waza
Katatedori kokyu nage
Katatedori nikyo omote con el dedito y “matar” el dedo gordo
Kukyo

Sábado
Tai no henko
Tai no henko Katatedori iriminage ura
Suwari waza shomen uchi ikyo
Katatedori shihonage palma abajo para dar la vuelta
Katatedori shihonage con dos sabores, estándar y avanzado, sin moverse del sitio
Katatedori ude garami
Katatedori sumi otoshi
Munadori yubi dori
Sodedori control del codo y proyección kaiten nage
Sodedori shihonage arrastrando a uke
Munadori con luxación de codo después de tai no henko
Katatedori kokyu nage
Desenfudado de la katana de iaido

Domingo
Tai no henko
Shomenuchi sankyo y Uchi kaiten sankyo con iniciativa
Kote mawashi osae
Exámenes shodan nidan y sandan
Shomenuchi kokyu nage escondiéndote después de koshi nage
Shomenuchi ikyo en Suwari waza

Kiichi Hine Sensei

Para terminar, algunas perlas que recuerdo a vuela pluma:

Disfrutad de la práctica del Aikido.
Mejorará vuestra salud y os sentiréis más felices.
Después intentad contagiar vuestra alegría a los que os rodean.

—Kiichi Hine Sensei


El sable no es para matar o herir a nadie, es para purificar tu alma y matar tus malos pensamientos, tu ira interior. Por eso le damos gracias antes de empezar y al terminar la práctica.

—Kiichi Hine Sensei


El objetivo del Aikido es repartir felicidad entre los que nos rodean

—Kiichi Hine Sensei


Practica Shin Kokyu en plena naturaleza, tanto como puedas, y comprenderás que todos somos uno con el universo.

—Kiichi Hine Sensei

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