Ideas preconcebidas I: los golpes en Aikido

Hola Daniel, primero de todo quisera felicitarte por este blog. Y como dirían en Oriente… “le deseo larga vida” a este espacio para que pueda cumplir con creces su misión de divulgar el arte de ser unirse con la Energía (gran palabra que quizás incluso la usamos sin darnos cuenta de su dimensión).

Ciertamente no he practicado mucho Aikido, pero tuve la oportunidad de que practicar brevemente con Charly Sensei, y que desde aquí le envío un fuerte abrazo!.
Mientras parcticaba Aikido, me recordó mucho el arte marcial que practiqué durante quince años y que luego tomé otro “rumbo energético”. Se trata sobre la actitud Sen no Sen, Go no Sen, Tai no Sen. En mi opinión la actitud del Aikido genuino, es Sen no Sen. Para quien por primera vez se acerca a practicar esta técnica de “atacar antes de que exista ataque” le puede parecer arrogante e injusta. Nada más lejos de la realidad pensar así. Realmente sucede que despiertas la maxima concentración, alerta, conexión con tu alrededor, para captar la energía, y en ese momento casi involuntariamente surje tu respuesta, “como si no lo hicieras”. De pronto te ves incluso moviendote y te vas dando cuenta que el adversario se mueve después y le sorprende porque de pronto ve que tú no estás en el lugar de su ataque.

Esta especie de “shamadi” es inolvidable cuando surge! Pero luego, te lo vas creyendo y se diluye…y a empezar de nuevo. Y cuando sale mal es muy fácil de detectar, porque te mueves antes del adversario. Tu has atacado y el adversario no ha hecho ataque o no quería hacerlo. Es decir, siempre debe haber una proporcionalidad, una causa y un efecto. Si ejerces demasiada respuesta mal, y si te anticipas sin que haya ataque, mal también. Lo que quiero decir es que Sen no Sen no quiere decir “guerra preventiva” “te doy un cachete porque me parece que te vas a desmadrar” o como en China, que se le ocurría al emperador matar a un servidor porque dentro de 500 años iba a tener un descendiente muy malevolo.

Al ver estos vídeos, me ha vuelto a recordar el Sen no Sen. O’Sensei se le ve tan intuitivo, que lo hace muy fácil y normal. Y ahí se ve verdaderamente la maestría.