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Primer viaje

El primer viaje de Felipe II

El primer viaje que realizó Felipe II fue desde Valladolid hacia Palencia pasando por:

– Cabezón de Pisuerga – San Martín de Valvení – Cévico de la Torre – Villaviudas –  

 

Los motivos de dicho viaje fue la peste, que obliga a la familia imperial -incluido al propio Carlos V- a dejar Valladolid el 23 de agosto de 1527, cuando el Príncipe tenía sólo tres meses y dos días, porque la gente en la villa del Pisuerga <<morían de peste>>.

 Era la terrible peste que diezmaba a los pobres y que obligaba a huir a lo ricos y poderosos.  Como ya sabemos en esa época Valladolid contaba con 7.000 vecinos, que, traducido en habitantes, serían alrededor de los 30.000. Podría parecer poca cosa, pero no para la tiempo. De hecho Valladolid era la ciudad más poblada de toda la meseta superior.

 De momento la familia real buscó refugio en Palencia, realizando el viaje en cuatro jornadas, en cuatro breves etapas ( Cabezón de Pisuerga, San Martín de Valvení , Cévico de la Torre y Villaviudas ) de una dos leguas, para no fatigar en demasía a la Emperatriz y para extremar los cuidados del Príncipe, todavía tan tierno.

El viaje se inició partiendo de Valladolid el 23 de agosto y pernoctan en Cabezón de Pisuerga con la corte. Haciendo siempre jornadas de tarde, al día siguiente duermen en San Martín de Valvení. El domingo, en Cevico de la Torre. El lunes, por llegar ya a Palencia, la comitiva regia se pone en camino por la mañana, hace alto a mediodía en Villaviudas y la noche entran en Palencia. Por tanto, dando un ligero rodeo, que sólo cabe explicar por escapar de lugares que estuvieran dañados por la peste.

 Imaginémonos, pues, la estampa, tantas veces repetida: el César Carlos yendo con su cortejo por los caminos polvorientos de España o del resto de Europa occidental, en jornadas de dos o tres leguas, pernoctando la mayoría de las veces en modestísimos lugares, en ocasiones auténticas aldeas, donde sería difícil encontrar acomodo para el primer personaje de Europa; acaso alguna casona de un vecino acomodado. Cabezón de Pisuerga era  un poco más grande que los otros pueblos, ya que se beneficiaba de la cercanía de Valladolid y de su paso sobre el Pisuerga.