Seth Godin, un gurú de internet, publicó hace poco una lista con las claves del éxito ordenadas por importancia, que podemos aplicar a cualquier ámbito de nuestras vidas, por ejemplo al Aikido:
Attitude (actitud)
Approach (enfoque, estilo de afrontar los problemas)
Goals (metas)
Strategy (estrategia)
Tactics (tácticas)
Execution (ejecución)
Normalmente pasamos la mayor parte del tiempo entretenidos con la ejecución, y precisamente hay que ir concentrándose en las categorías superiores; por ejemplo: si las tácticas no son correctas, la ejecución no servirá de nada. Si la estrategia no es la adecuada, la táctica será infructuosa. Si las metas no son las ideales, la estrategia será estéril. Si el enfoque no es el bueno, siempre elegiremos las metas erróneas. Si la actitud no es correcta, el enfoque y todo lo demás no servirá para nada.
Hagámoslo ahora al revés: si cambias la actitud, cambiarás la forma de encarar los problemas (o ataques). Si cambia tu enfoque, elegirás las metas adecuadas; con las metas adecuadas, acertarás la estrategia, después la táctica correcta y así será fácil ejecutar la acción (el movimiento, la técnica).
¿Qué os parece?
¿Habéis conseguido cambiar vuestra actitud a través del Aikido? Yo todavía no…
Este próximo fin de semana estaremos en Cartagena, en el segundo curso de Aikido que organizan nuestros hermanos de Cartagena. Al igual que el año pasado, será impartido por Diego Espinosa Sensei, 5º Dan y cabeza del Kumano Juku España. ¡Nos vemos allí!
Hola de nuevo, sé que os debo la tercera parte de la crónica del curso nacional de Aikido Budo, pero esta vez sí tengo una buena excusa: acabo de ser padre por segunda vez. Eso significa que voy a ralentizar un poco el blog y seguramente publicaré cosas más “ligeras”.
Por ejemplo, esta semana pasada me alegré mucho de ver como dos de los blogs de Aikido que sigo habitualmente dedican sendas entradas a Hikitsuchi Sensei. Cada vez hay más vídeos e información sobre él en la red. Sin duda se trata de una buena noticia:
Hola de nuevo, ha pasado demasiado tiempo pero ya van llegando las fotos y las crónicas del resto de asistentes. Como este blog lo hacemos entre todos, esta entrada va a llevar material de nuestros buenos amigos de Cartagena y Elche. Pronto habrá una tercera crónica con más fotos y vídeos, pero mientras, un aperitivo (cortesía de Fernando):
El pasado fin de semana del 11 y 12 de Septiembre se celebró el tan esperado 2º Curso Nacional de Aikido Budo impartido por el tan añorado Sensei Charly Díez Ortiz ( 5º Dan ), ya que tras su marcha a Vietnam en el año 2007, lo echábamos muchos de menos.
El curso fue un recuerdo a los dos Senseis que más marcaron la vida de Charly Sensei: Michio Hikitsuchi Sensei (10 º Dan) y Tojima Sensei (6º Dan), ambos ya fallecidos.
Maravillosas fueron sus explicaciones para mostrarnos los “pequeños detalles” que no se ven y que caracterizan a las técnicas de Shingu.
Espectaculares sus “Irimi nages” directos, ya que no se ven venir desde la cadera. Impresionante su energía de KI con la que trabaja. Meticuloso como el que más, nos indicó el camino a seguir dentro del “Kumano Juku” para no olvidar nunca “El Budo”, ya que como bien nos dijo, el Aikido sin Budo es como un hijo sin madre o como un cuerpo sin huesos.
Al finalizar el curso, se produjo un momento muy emotivo ya que le regalamos una placa conmemorativa del evento que le emocionó muchísimo.
¡¡ GRACIAS SENSEI POR TUS MAGNÍFICAS EXPLICACIONES Y ESPEREMOS VOLVER A DISFRUTAR DE TI EN PRÓXIMOS CURSOS !!
Crónica del Kumano Juku Cartagena:
Los días 11 y 12 de Septiembre se celebro en el Centro de Tecnificación de Alicante el II Curso Nacional de Aikido Budo impartido por el Maestro Charly Diez Ortiz, 5º dan de Aikido, al cual asistimos alrededor de unas 40 personas entre profesores y alumnos. Después de estar casi 4 años fuera de España, el reencuentro con el maestro fue de los más emotivo para sus alumnos directos y una fuente de inspiración para los que no lo habíamos conocido hasta ese momento.
Ya en la presentación se notaba la energía que el Maestro desprendía no solo por su carácter, si no por la fuerte presencia y serenidad que irradiaba.La sesión del sábado por la mañana estuvo cargada de una práctica muy animada e intensa, llena de recuerdos y enseñanzas cuando el Maestro rememoraba su paso por el Kumano juku Dojo y a sus maestros.
Se comenzó con un calentamiento tradicional y en seguida nos pusimos a trabajar. La energía y fuerza que transmitía el Maestro se contagio a todos los que allí estábamos incluyendo a practicantes de otras artes marciales que hasta allí se acercaron a realizar este curso. Siempre atento a todo el mundo y la forma de trabajar, no ceso de aclarar dudas, corregir y enseñar esos pequeños detalles de posiciones de manos, pies, etc., que hacen que el aprendizaje del Aikido se saboree aun más.
La sesión de la tarde fue dedica a Tojima Sensei, fallecido recientemente y alumno más aventajado de Hikitsuchi Sensei, ambos maestros de Charly.Aunque estábamos un poco relajados por las tres horas de práctica de la mañana y la comida, el espíritu de Tojima Sensei estuvo presente y nos dio la energía suficiente para realizar la sesión.
El Maestro empezó la sesión como la empezaba Sensei Tojima, se anudo un pañuelo de tela con el sol naciente y algunas inscripciones en la cabeza y pidió su fuerza y energía para que todos tuviésemos una práctica productiva y llena de energía. La verdad que el cansancio hizo mella en todos los que allí estábamos, pero no por eso dejamos de trabajar y de atender a las explicaciones que el maestro nos daba.
La sesión del domingo por la mañana estuvo dedicada al trabajo con armas, una pena el no haber podido realizar la sesión y no poder contar el trabajo realizado por el Maestro.Esperamos que el Maestro Charly pueda hacer hueco en su agenda y vuelva pronto para darnos otro curso o clase.
Francisco tobarra. http://www.aikidocartagena.es/fudoshin/eventos/cursos%20realizados/II%20CURSO%20NACIONAL%20DE%20AIKIDO%20BUDO.pdf
Un fin de semana intenso.
Reencuentros.
Abrazos.
Emoción.
Dolor (de rodillas, se entiende).
Tres años después, Charly Sensei reapareció como si el tiempo se hubiera detenido, como si no hubiera pasado el tiempo. Él sigue igual, mientras que nosotros estamos más viejos, gordos y calvos (menos las chicas, que cada día están más guapas). Eso sí, como nos comentó orgulloso y emocionado, menos patosos que antes de marchar a Vietnam. Tres reverencias y cuatro aplausos a los 4 puntos cardinales y el curso ya había empezado. Calentamiento clásico de Shingu, Chinkon Nishin no Hoo y Tai No Henko. Como siempre, como hemos seguido haciendo mientras él no estaba.
Foto de grupo del sábado; falta gente, pero está casi todo el mundo.
El tatami: magnífico, la verdad es que el Centro de Tecnificación es el mejor sitio de Alicante para un curso de estas características; había suficiente sitio para trabajar sin agobios y trabajar los ukemis con tranquilidad. Agua fresca en cantidad, un Kamiza desmontable cortesía de Juanjo y todos los detalles controlados. Desde aquí quiero felicitar personalmente a Fernando y a Juanjo por la espléndida organización, a la que sumé lo mejor que pude y supe. Muchas gracias, chicos, sois grandes.
Charly Sensei con los tres mosqueteros: Fernando, Juanjo y un servidor
El ambiente: eso no se puede describir con palabras, había que estar allí para sentirlo; para que os hagáis una idea, hasta la gente que se acababa de conocer ese fin de semana se despedía con un abrazo de varios segundos. El verdadero Aikido genera ese estado de paz y de armonía, y creo que ese era el sueño de O’Sensei, que todo el mundo practicara Aikido y se olvidara de guerras y disputas. Cuando hablaba de amor y de paz, se refería a un estado mental conseguido a través del entrenamiento, no a practicar sin buscar hacerle daño a nadie; ya lo dice el refrán, quién bien te quiere te hará llorar.
La foto deseada: Charly Sensei y yo ¡con hakama!
Las técnicas: en su línea, con varias intensidades, desde el Aikido más fluido y circular hasta el más duro y directo. Mucha iniciativa y trabajo de armas relacionado con el de manos vacías. Todo magnífico, la gente entusiasmada, y Charly emocionado y orgulloso de sus alumnos, pues tras tantos años ya sólo tenía que pulir detalles.
Kote Gaeshi clásico de Shingu. SIn palabras…
Bueno, éstas son mis primeras impresiones escritas a vuela pluma, conforme vayan llegando las fotos y subiéndose los vídeos iré publicando más detalles sobre el encuentro. Hablamos…
Hace un tiempo escribí una entrada sobre los maestros de Aikido que mayor nivel alcanzaron en su práctica. Intenté hacer una lista corta, aún a riesgo de dejarme a muchos maestros fuera. Charly Sensei me echó la bronca por no incluir a Tojima Sensei (9º Dan), el alumno más aventajado de Hikitsuchi Sensei en su opinión. Como tenía razón, ahora voy a abrir una serie de entradas sobre los mejores maestros del Kumano Juku Dojo, y la inauguro con Yasushi Tojima Sensei:
Foto cortesía de Jack Wada (courtesy of Jack Wada)
Este maestro vivía en las montañas, donde hacía katanas y herramientas de trabajo artesanales. Llevaba una vida sencilla y austera, como un verdadero samurái. En los últimos tres años que estuvo Charly Sensei en Shingu, Tojima se hizo cargo de las clases en ausencia de Hikitsuchi Sensei, bastante enfermo en aquella época. Seguramente ahora sería Dojo Cho del Kumano Juku Dojo, pero murió pronto, a mediados de los noventa. La verdad es que todo el que lo conoció habla maravillas de él, y cuentan anécdotas escalofriantes al estilo de las que protagonizaba O’Sensei. De hecho, el mismo Anno Sensei opina que de haber vivido más tiempo habría sido el único capaz de alcanzar al Fundador. Ahí es nada.
Hay pocos testimonios directos en internet sobre Tojima Sensei, casi todos vienen de los alumnos americanos que estuvieron en Shingu en la década de los setenta (Jack Wada, Linda Holiday, Tome Read, etc.). Por supuesto, nada en castellano, de modo que voy a complementar la escasa información existente con lo que me contó Charly Sensei sobre él. Por ejemplo, me contó la vez que le dijo a Clint George que cogiera una katana y le atacara lo más rápido posible; el americano, un séptimo dan de casi dos metros, se dispuso a realizar un shomen con toda su alma y antes de que bajara la katana, Tojima Sensei ya le había cortado con la mano el estómago tres veces y salido de la distancia del corte. Clint se quedó blanco, como si hubiera visto un fantasma; le dijo a Charly que nunca había visto antes a nadie hacer algo con tanta sangre fría y tanta perfección. Para Tom Read Sensei, alumno americano de Hikitsuchi Sensei, Tojima era “la persona más terrorífica que ha visto con una espada” (“the scarriest man I’ve ever seen with a sword”)
Otra anécdota, más romántica, contada de primera mano por Charly Sensei: un día Tojima Sensei, que casi nunca hablaba, antes de comenzar la clase se sentó en seiza y se dirigió a los alumnos diciendo: “Aprended lo que podáis en este lugar y aprovechadlo al máximo, porque cuando nos vayamos los pocos que quedamos en Shingu no sé lo que va a pasar con el Aikido Budo”. Después de estas palabras dio la clase como si no hubiera dicho nada, con la perfección habitual y practicando sin dar lugar a aberturas; en esto Tojima Sensei no admitía errores, si tenías que repetir veinte veces hasta hacerlo bien te lo hacía repetir hasta la saciedad.
Tojima Sensei trabajando con el bo
Una de sus frases que más me han impactado es ésta:
Algo que puedes hacer cuando eres joven y dejas de poder hacerlo al envejecer es deporte, no budo.
Tojima Sensei (sentado con su famoso pañuelo) con Jack Wada (uke)
Anécdotas de Tojima:
Después de la clase de la tarde, Tojima Sensei estaba dando una demostración de atemi (golpes) y suki (aberturas). De repente, le pidió a Clint George, que llevaba poco tiempo allí y todavía estaba evaluando a los diferentes senseis, que tomara un bokken de la pared del dojo y lo agarrara lo más fuerte que pudiera. “Voy a quitarte el sable de tus manos y no vas a sentir nada”. Clint se preparó, bajó su centro lo máximo posible, pegó sus codos al cuerpo, y se preparó para resistir cualquier intento de Tojima para mover su bokken. No iba a dejar que se le escapara de sus manos. Al fin y al cabo, si Tojima era capaz de mover el sable, seguro que no podría hacerlo sin que Clint lo sintiera. Tojima Sensei levantó el bokken por encima de su cabeza con calma, con la punta apuntando al techo del dojo. De repente, un kiai y cortó. Mis sentidos se esforzaban por descifrar lo que pasó, aunque algunos detalles era claros como el agua. No sólo había salido el bokken disparado de las manos de Clint, sino que lo había roto. Una mitad subió hasta el tocar el techo y a otra rebotó en el tatami con tal fuerza que casi rebota hasta el techo también. Mientras todo esto ocurría, Clint ni se había movido. Todavía estaba en posición, reclinado, codos plegados y sus manos firmemente agarradas a… ¡ nada! Después vino y me dijo: “Jack, normalmente no me impresiona la gente que habla mucho (en aquella época Tojima Sensei podía ser muy verbal), pero honestamente, ¡no sentí nada!”. Mientras tanto, Tojima Sensei se dio cuenta de que el bokken de la demostración pertenecía a alguien. La noche siguiente se deslizó en secreto por el dojo y sin que nadie le viera colocó un bokken nuevo en el lugar del roto.
Otra más de Jack Wada:
Hay golpeos en Aikido. Los atemis están en cada técnica. Tojima Sensei, especialmente, se concentraba intensamente en los aspectos de golpeo y sus relaciones con las aberturas o sukis en los movimientos. Te podía golpear en cualquier momento. Una vez le vi en la parte trasera del dojo de Shingu, que es más estrecha, saltando por el aire, ejecutando un golpe volador lateral contra el muro del dojo, impulsarse hasta la pared contraria, rodar hacia atrás y llegar hasta el otro lado sin tocar la pared. Sí, en términos de Castaneda, podía “parar el mundo”. No creo que haya recibido entrenamiento específico sobre estas cosas, era simplemente algo por lo que sentía predilección. En su camino marcial fue algo que asimiló, y que le permitió conectar golpeo y trabajo de armas.
Ahora la sección de vídeos:
Bueno, espero que os haya interesado, dentro de un par de semanas podréis sentir parte de la energía de Tojima Sensei en el curso de Charly Sensei, quién le conició y entrenó con él durante 5 años.
Actualización (7/9/2011):
Recuerdo que Charly me contó que Tojima Sensei era muy exigente y no paraba hasta que todo el mundo practicaba correctamente y sin aberturas. Esta semana Jack Wada ha subido a YouTube otro vídeo donde Tojima le hace de uke en un iriminage ura. Cada vez que el joven Jack se adelantaba o atrasaba Tojima le hacía una contratécnica para demostrarle su error:
Ya queda menos de un mes para que venga Charly Sensei a España, y ya estoy que me entreno encima. Hace mucho tiempo que no le veo en persona, y más todavía sin entrenar con él. Va a ser algo memorable, un curso con la energía habitual y como siempre, combinando el Kihon Waza con un poco de Budo, donde se le cambia el chip a las técnicas para hacerlas más marciales, más efectivas. Para haceros una idea, Fernando acaba de subir un vídeo se su último curso en España, espero que os guste:
En las imágenes se ven técnicas calcadas a las de Hikitsuchi Sensei, con quién Charly entrenó 5 años consecutivos en Shingu, Japón. Si os extraña ver golpes de puño como final de una técnica de Aikido, echad un vistazo a estos vídeos:
http://www.youtube.com/watch?v=LUajLtAMZ8Y
Mucha gente tiene la idea de que O’Sensei, al predicar que el Aikido es amor, dejó atrás las técnicas con atemis y golpes de puño, pero los documentales son claros al respecto. Los practicó hasta el último de sus días, y sospecho que pensaba que un golpe en la cara se puede dar con cariño. Ahora en serio, creo que tiene que ver con el poder de atracción del que siempre hablaba: si tu adversario decide atacar, ya ha perdido, porque se encuentra el golpe o la proyección; dicho de otra manera, es él el que te pega con la cara en el puño. 😉
En este vídeo se ve trabajar a Saotome Sensei (que será muy bueno, no lo pongo en duda), para compartir con vosotros algo que me preocupa mucho cuando entreno: las aberturas.
No se puede hacer un shihonage de tal manera que el uke te pueda agarrar por la espalda o darte una colleja, o levantar mucho los brazos en el kote gaeshi para que entren patadas, como se ve en la segunda mitad del vídeo:
No se trata de criticar a nadie, pero se necesitan imágenes para ilustrar mi argumento y a alguien le tenía que tocar. Sí creo que es más interesante fijarse en cosas que no deben hacerse (todo el mundo se equivoca, hasta los octavos danes), y tenerlas en cuenta en los entrenamientos. Aquí tenemos un Kote Gaeshi mal entendido, ejecutado de manera lateral, lo que empuja al uke hacia la cabeza de tori. Fijaos en el pie izquierdo del pobre chaval, que le va a dar un buen golpe a su compañera:
Espero que se entienda bien mi intención al hablaros de aberturas: no se trata de decir que nuestra línea sea mejor que otras, eso es tan absurdo como comparar artes marciales. Lo que intento transmitir es que no importa cuál sea vuestra línea o maestro, hay que buscar siempre que no haya huecos por donde entren golpes o contras. Para eso hace falta un par de cosas:
Cuando se hace de uke hay que marcarle bien las aberturas al compañero, bien con un atemi o con un golpecito cariñoso. Eso despierta los reflejos y mueve la mente a un nivel mucho más profundo que una explicación verbal. Eso me lleva a la segunda cuestión: no se debe hablar mientras se practica, y si hay dudas la pregunta se le hace al Sensei, no al compañero. He estado en cursos donde se montaba tal follón que parecía un gallinero o una discoteca…
Cuando se hace de tori, es importante medir bien la distancia y el tempo, y cuidar siempre las aberturas como las que se ven en la foto. No importa si uno se equivoca de vez en cuando, siempre que lo tengamos en cuenta; yo mismo soy mucho peor que Saotome o esta chica, sólo les he usado para explicaros mi concepto.
Hay muchas anécdotas del Fundador, contadas en primera persona por sus alumnos y quienes le conocieron, que describen hazañas imposibles, cosas que desafían los límites de la física. Cualquiera que practique un tiempo artes marciales sabe que la mente guía al cuerpo y que el poder oculto del ser humano es increible. Con un poco de suerte y muchos años de entrenamiento uno mismo puede llegar a experimentar o ver fenómenos igual de extraños que los que voy a empezar a recopilar:
Esta anécdota le ocurrió a Hikitsuchi Sensei mientras entrenaba con el Fundador. La primera vez que leí esta historia se citaba un detalle que en los textos que he encontrado no aparece, y es que el entrenamiento se hizo a oscuras, con la luz de la luna que entraba por las ventanas:
« Un día del mes de Agosto de 1957, hacia la 1 de la madrugada, el Maestro Morihei UESHIBA me pidió que me lavantase para ir a entrenarnos al dojo y practicar el ken (SHO CHIKU BAI NO KEN). En el dojo, pues, yo atacaba a O Sensei, pero durante la ejecución de uno de estos ataques sentí que el bokken de O Sensei se había roto. Su bokken efectivamente estaba cortado a una buena longitud de la punta. Me puse a buscar dentro del dojo el extremo cortado, pero O Sensei me dijo « ¿Qué es lo que buscas? ¿No es esto lo que buscas? » y diciéndolo sacó el extremo roto del bokken de dentro de su keikogi (vestidura de entrenamiento). Yo estaba estupefacto ya que estaba convencido de que el extremo roto se había dispersado por el dojo y me preguntaba cómo había podido caer en el interior del keikogi de O Sensei. Fue aquel día que O Sensei me desveló el “secreto” del ken del aikido (SHO CHIKU BAI NO KEN) y me entregó el makimono del palo del aikido (MASAKATSU BO-JUTSU). »
Traducido por Aikido Ibiza a partir del libro de Gerard Blaize.
Especialmente la primera mitad del vídeo, donde se ve a O’Sensei, Hikitsuchi Sensei y los grandes del Kumano Juku Dojo; luego el protagonista es Jack Wada, autor del vídeo y de la música, y uno de los alumnos no-japoneses de Hikitsuchi.
Me ha gustado por su emotividad, aunque Jack Wada es más Anno Sensei que Hikitsuchi. [kml_flashembed movie="http://www.youtube.com/v/Wdnb4rRxDkk" width="425" height="350" wmode="transparent" /]