Creada en Madrid en 1931 por Clara Campoamor, forma parte de un conjunto de organizaciones progresistas que impulsaron la formación de las mujeres para promover su intervención en la vida pública, como la Asociación Femenina de Educación Cívica, dirigida por María Lejárraga, o la Acción Política Feminista Independiente, coordinada por Julia Peguero. La URF de Alicante fue fundada por iniciativa de Manolita Luque en agosto de 1933. En octubre se eligió la junta provincial de la organización: bajo la presidencia de Luque, eran secretaria Sara Oarrichena, tesorera Esther Gomis, contadora Encarna Carratalá y vocales Josefa Campillo y Antonia Cela (Diario de Alicante, 6-X-1933).
Desde su aparición, la URF se centró en la difusión de valores republicanos entre las mujeres, para “que todas las mujeres que voten sepan a qué van, y su papeleta sea la de la persona que ellas quieran y por sus ideales prefieran”, para que triunfen “los verdaderos republicanos” (Diario de Alicante, 9-IX-1933). Con motivo de la convocatoria de elecciones de 1933, las primeras en que las españolas pudieron ejercer el derecho al sufragio, la URF de Alicante reclamó la inclusión de mujeres en las listas electorales republicanas (sin éxito) y pidió el voto de las mujeres para las candidaturas republicanas de izquierda.
En mayo de 1934, la URF inauguró su local en Alicante, época en que decía contar con 200 afiliadas (El Luchador, 15-V-1934). Además, desplegó un ambicioso programa de conferencias, entre las que destacaron la impartida por Victoria Kent sobre “El decoro de la República”, la de Ismael López en torno a “Los derechos políticos y sociales” o la de Álvaro Botella Pérez con motivo del centenario de la abolición de la Inquisición (El Luchador, 29-V-1934, Diario de Alicante, 7-IX-1934, El Luchador, 16-VII-1934).
La URF, cada vez más decantada en su apoyo a Izquierda Republicana, también participó en iniciativas vinculadas a la cultura republicana, por ejemplo en un homenaje a Galán y García Hernández, o en campañas en defensa de los presos y condenados a muerte por los sucesos de octubre de 1934 en Asturias. A ello añadió las clases de cultura general y corte y confección para asociadas, así como el reparto de ropa a pobres y de juguetes a niños.
Probablemente URF desapareció en Alicante con la creación de Izquierda Republicana Femenina en 1935.
Autora: Mónica Moreno Seco