MEDIATECA, Apuntes de cine
El Renacido (2015)
Un western majestuoso
El director de Babel, 21 gramos y Amores perros Alejandro González Iñárritu, nos presenta su última película. Un western impactante, una odisea emocional, que no va a dejar a nadie indiferente. El renacido, una historia de supervivencia que te hará viajar por la naturaleza más salvaje y fría de Norteamérica, además es una epopeya que te desgarrará la piel como si fuera el zarpazo de un oso salvaje. La historia está inspirada en hechos reales, y pone a un género como el western en primera línea de salida, después del éxito de la crítica, como del reconocimiento en festivales. El renacido, ha acaparado infinidad de premios importantes: Critics Choice Awards (2), Premios BAFTA (5), Globos de Oro (3), Premios Oscar (3), y en los que aparecen como ganadores Leonardo Di Caprio (actor principal), Alejandro González Iñárritu (dirección), Emmanuel Lubezki (fotografía).
A la segunda va la vencida. El renacido es el segundo intento de realización del film, tras la primera fallida en 2001. Tuvo un presupuesto de 60 millones de dólares. Fue rodada en el otoño e invierno del hemisferio boreal y en Tierra del Fuego, con lo que se consigue impresionantes imágenes. Las localizaciones, Canadá, Montana, Alaska y California, con unos paisajes de montañas, bosques y ríos impactantes. La historia sería bien distinta sin este hábitat, en el que se mueve Hugh Glass “El renacido”.
Algunas consideraciones
Lo mejor y lo peor del renacido. Desde mi punto de vista, el resultado es muy positivo, es una película que nos atrapa, con una visión exagerada “excesiva” de la historia. Se buscaron unas localizaciones con temperaturas y relieves extremos, también ha contribuido a ello el largo metraje. Puede resultar algo lenta en algunas fases de la película, pero una vez metido en la trama esto hace que se pueda disfrutar además de las imágenes y del paisaje.
La fotografía de Emmanuel Lubezki es impresionante, acorde con las localizaciones, además la utilización de la realidad digitalizada, el resultado es portentoso. Lo que le ha valido un Oscar.
La interpretación de Leonardo DiCaprio, también se puede catalogar como excelente, un personaje también agrandado gracias a su interpretación. Un Oscar más para la película.
La dirección de Alejandro González Iñárritu muy destacable, que junto con la fotografía y la interpretación de DiCaprio dan como resultado un film excelente de aventuras, un western extremo que atrapa.
El renacido. La novela, el personaje
Intrahistoria. El escritor norteamericano Michael Punke se le ocurrió la idea de escribir una novela mientras viajaba en un avión, después de descubrir en un libro de historia a un personaje “Hugh Glass”, un cazador de pieles, un hombre de frontera estadounidense conocido por las hazañas realizadas en el Oeste a principios del siglo XIX. Fruto de ello nace “El Renacido: una novela de venganza” (2002).
En 1822, apareció en un anuncio en la Missouri Gazette de San Luís publicado por el general William Henry :
“… buscando un centenar de jóvenes emprendedores… para ascender el Rio Misuri hasta la fuente, donde serán empleados por uno, dos o tres años…”
Hugh Glass participará en esta empresa junto a otros destacados hombres de frontera y tramperos. Estos emprendedores serán conocidos como los “Cien de Ashley”. En agosto de 1823 mientras exploraba es atacado por una osa grizzli… y a partir de aquí empieza la epopeya, la historia de una venganza. Esta es la novela de M. Punke, de la que se vale el director Alejandro González de Iñárruti para realizar la película El renacido, a partir de un magnífico guión adaptado por éste y por Mark L. Smith.
FOTOGRAMAS. Unas pinceladas
El renacido (la película). Una historia de supervivencia y rebeldía. Un hombre enfrentado a un destino adverso y a un entorno hostil.
Un lugar. La historia está ubicada en las profundidades de la América salvaje, un vasto territorio casi deshabitado, en la cuenca alta del rio Misuri (tierras de los actuales estados de Dakota del Sur y Montana).
Un tiempo y un contexto histórico. Año 1823. Un territorio habitado por tribus de nativos americanos, las tribus indias están en continua hostilidad, luchando entre ellos.
Mientras que el hombre blanco caza y trafica con pieles, en las llamadas tierras de frontera, un ingrediente que da más inestabilidad aún.
El protagonista, Hugh Glass (Leonardo DiCaprio). Un ser perseguido por la fatalidad, perdió a su mujer (india) y a parte de su familia como consecuencia del clima de hostilidad permanente imperante en estos territorios.
“¿Puedes oír el viento padre?
¿Recuerdas lo que decía madre sobre el viento?
El viento no puede tumbar a un árbol con fuertes raíces”
La expedición, la intrahistoria, la traición
Hugh Glass participa junto a su hijo mestizo Hawk en una expedición de tramperos para recolectar pieles. Durante la travesía es atacado por un oso grizzli, que lo deja malherido, siendo posteriormente abandonado a su suerte, iniciativa tomada por un miembro de su equipo John Fitzgerald (Tom Hardy), más interesado en recoger la recompensa económica que le espera al final de la travesía.
La odisea. Historia de una venganza
Tras la traición soterrada de John Fitzgerald, y al borde de la muerte Hugh Glass “El renacido”, empieza una persecución implacable y obsesiva, que va incluso más allá del espíritu básico de supervivencia.
Toda sus capacidades y fuerza vital las pondrá al servicio de una idea, encontrar a John Fitzgerald. La venganza está servida.
Es ahí donde empieza realmente la historia, la trama. El dramatismo de la búsqueda en la que Hug Glass tendrá que transitar por un medio físico hostil, con una naturaleza virgen desbordante, con animales salvajes, de ríos caudalosos con cascadas y rápidos inabordables, llanuras y montañas nevadas en el más crudo invierno boreal.
Os hemos dado unas pinceladas, ahora os toca a vosotros seguir esta persecución sin tregua, esta potentísima historia de supervivencia.
Tenéis un largo camino, algo más de dos horas y media, para acompañar al renacido, desde el cómodo sofá de casa.
Alejandro González Iñárritu
El director mejicano “ha tirado la casa por la ventana” en la realización de esta película. La filmación fue realizada en escenarios naturales, y tuvo una duración de nueve meses, todo un embarazo, siendo las localizaciones en Canadá, Montana, Alaska y California, esto supone el triple de tiempo de un rodaje, y todo ello en unas condiciones climatológicas adversas, en el crudo invierno boreal de estas latitudes. González Iñárritu buscaba con ello el máximo realismo y dramatismo, utilizando los escenarios más impactantes y adversos para sublimar la hazaña del renacido. Todo un acierto.
El zarpazo del oso. Para los más sensibles o incrédulos… es sólo sangre artificial, un poco de “tomatina”, ¡menos mal, uuuuf, que alivio!… Un poco de humor después de ver la peli con el desgaste de las descargas de adrenalina, ¡tampoco viene mal!
La puedes encontrar en el catálogo de la Biblioteca de la BUA,
