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J. D. Salinger i Joan Brossa: escriptors diferents

Este mes celebramos el centenario de dos escritores J. D. Salinger y Joan Brossa que, marcados por una guerra, llevaron su inspiración de manera muy diferente. La Biblioteca de Filosofía y Letras te invita a conocerlos mediante este vídeo. Si te apetece profundizar en la obra de estos autores, acércate a la 2ª planta de la Biblioteca y llévate en préstamo algunos libros.

J. D. Salinger nació en Nueva York, fue un niño problemático expulsado de diferentes escuelas y comenzó a escribir en su adolescencia, durante los cuatro años que sirvió en el ejército durante la II Guerra Mundial, siempre llevó consigo una máquina de escribir. Pronto comenzó a buscar colaboraciones en diversas revistas y fue The New Yorker con la que firmó un contrato de casi exclusividad. Allí se pudieron leer los primeros fragmentos de El guardián entre el centeno. Este libro cautiva porque muestra el mundo sin contar con la opinión de los adultos, centrando toda su atención en la manera en que un adolescente ordenaría la realidad. Su protagonista se convirtió en el antihéroe por excelencia de toda una generación de adolescentes que, en plena guerra fría, vieron el reflejo de sus propias inquietudes y angustias en las críticas feroces que Salinger hacía contra el mundo y la moral de los años cincuenta.

Una vez conseguida la fama, el autor se recluyó y sólo concedió en 1974 una entrevista telefónica a The New York Times para defender su vida privada. “Hay una paz maravillosa en no publicar. Es pacífico. Tranquilo. Publicar es una terrible invasión de mi vida privada. Me gusta escribir. Amo escribir. Pero escribo sólo para mí mismo y para mi propio placer”.

Fuente:

https://elpais.com/diario/2010/01/29/cultura/1264719601_850215.html

https://www.jotdown.es/2017/07/salinger-punado-psicopatas-los-chicos-del-mkultra/

 

Joan Brossa i Cuervo Joan Brossa i Cuervo (Barcelona 1919-1998) va ser un poeta, dramaturg i artista plàstic català sense distinció de gèneres. És considerat el poeta avantguardista català més important de la segona meitat del segle XX. A més, és un dels creadors de la poesia visual catalana encara que la seua obra plàstica no ocupa més que una petita part de la seua enorme producció.

En la Guerra Civil espanyola va haver de partir al front de Lleida a lluitar per la República. En aquesta època va començar a escriure i, en tornar a Barcelona, va entrar en contacte amb alguns dels artistes de l’avantguarda, especialment amb el poeta J. V. Foix i el pintor Joan Miró. En la dècada dels quaranta, en plena postguerra, va conèixer Joan Ponç i Antoni Tàpies. El 1948 funden el mític grup Dau al Set.

Fins al final de la dictadura va ser poc conegut malgrat l’originalitat i una obra molt prolixa, que va ser redactada exclusivament en llengua catalana. La seua obra poètica, d’arrel surrealista, és copiosa i multiforme, però va començar a conèixer-se tardanament amb la publicació de Poesia rasa (1970. Va ser també autor de peces de teatre (La jugada, 1960; Gran guinyol, 1962) i d’una original obra plàstica.

Per a ell la poesia era una aventura oberta que va voler recórrer a través de totes les disciplines possibles: poesia literària, poesia escènica (teatre), cinema, poemes visuals (obra sobre paper), poemes objecte (arts plàstiques) o poemes transitables (escultura).

Al llarg de la seua vida va col·laborar amb pintors, escultors, músics, fotògrafs, cineastes i artistes de tots els gèneres. Si bé la seua obra plàstica no ocupa més que una petita part de la seua enorme producció, gràcies a aquesta Brossa s’ha convertit en un referent mundial.

Font:

https://www.salabeckett.cat

https://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/brossa.htm

https://www.escritores.org/biografias/124-joan-brossa-i-cuervo-


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… la justicia, no es solo cuestión de fondo. Sobre todo, es cuestión de forma. Así que no respetar las formas de la justicia es lo mismo que no respetar la justicia. Lo comprende, ¿verdad? -Melchor no dice nada; el subinspector esboza una sonrisa tolerante-. Bueno, ya lo comprenderá. Pero acuérdese de lo que le digo, Marín: la justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.

Terra alta / Javier Cercas

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