6 de abril de 2022
Hoy es un día especial en la agenda de Reme Blanes; confluyen su jubilación tras 40 años de servicio en la Universidad de Alicante, y su cumpleaños (pecata minuta+guiño).
Reme comenzó sus estudios de Fª y Letras en una todavía balbuceante Universidad de comienzos de los ‘70 que ya nunca abandonaría, pasando al plano profesional en diferentes etapas y servicios bibliotecarios.
Casi sin dejar los libros y los apuntes de la carrera, se incorpora primero a la Biblioteca de Magisterio y posteriormente a la Biblioteca de Fª y Letras donde coincide con sus profesores de anteayer y el personal de la facultad, en una continuidad de ambiente familiar del que solo guarda buenos recuerdos.
Los primeros años de la década de los 90 suponen el salto del mundo analógico al digital, desde su nuevo puesto en la dirección de la recién creada Unidad de Adquisiciones. “Tuve que dar el rango de direcciones IP para la contratación de una base de datos”, algo que ahora hemos naturalizado, pero probablemente en aquellos primeros tiempos sonaría a algo así como “用於承包數據庫的 IP 地址範圍”.
Años pues de aprendizaje y asimilación con todo lo que de atractivo e ignoto comportó ese radical cambio en la conformación de nuestro presente en digital.
Ya con el comienzo del nuevo siglo Reme toma las riendas al frente de la dirección de la Biblioteca Universitaria, puesto desde el que se jubila.
A destacar con subrayado y negrita el tema de la profesionalización del personal del servicio, siempre en continua formación e implicación esforzada, cada cual en su desempeño particular, y con apartado especial para el carácter de proximidad humana que ha procurado hacer fluir en los mecanismos de la maquinaria BUA (la que redacta da fe de ello, sin coba (créase or not), y creo no equivocarme al pensar que me siguen much@s).
Una maquinaria formada por unidades y bibliotecas donde destaca la independencia e iniciativas razonadas y argumentadas por las personas responsables al frente de cada una de ellas. Una independencia traducida, sin embargo, en un muy conseguido ensamblaje final de lo que supone el conjunto del Servicio.
Balance final, pues, más que positivo como también ha podido comprobar con las recurrentes felicitaciones (in crescendo) a la labor desempeñada por el personal bibliotecario, recogidas en las periódicas Comisiones de usuarios.
Atención spoiler. Reme Blanes es una persona normal.
Cuando nació su hija Ana informaron a la reciente madre que la niña “pesa y mide normal”. Y aquel simple diagnóstico de la recién nacida significó un punto de inflexión que marcó su vida. Y bien mirado tampoco esto es cosa menor, sino mayor (como diría aquel registrador de la propiedad), pues igual que bienvenido es siempre el sentido común, que, por desgracia, es el menos común de los sentidos, bendita sea igualmente esa “normalidad” bien entendida y cada cual buen Sancho extraiga sus conclusiones.
Y ahora toca nuevo capítulo, que no final.
Entre una mirada velada de nostalgia por lo que deja (trabajo, relaciones personales..) y la ilusión por explorar nuevas facetas de su vida, nos desvela las tres primeras entradas en su nueva agenda:
“Vivir, vivir, y vivir”. No es mal plan este, ¡pardiez!.
Nos despedimos de Reme con un hasta luego de corazón y si se nos permite y, como material anejo, le dedicamos esta banda sonora para su estrenada etapa.
¡Que lo disfrutes Reme!
