Home »

Reseña: “Futurofobia” de Héctor García Barnés

Desde la Biblioteca de Geografía queremos empezar este año recomendándote la lectura de Futurofobia, de Héctor García Barnés.

Futurofobia no es sólo una palabra. Futurofobia es, literalmente, «miedo al futuro». Pero tiene muchos más significados.

Futurofobia es crisis continua, es miedo a que ocurran cosas, es pensar que nada de lo que puedas hacer cambiará las cosas. Es no tener ilusiones, es estar agotado, es creer en las distopías y desconfiar de las utopías.

Futurofobia es individualismo, es determinismo, es sustituir el deseo por el miedo. Es ser conservador y pensar que todo tiempo pasado fue mejor.

Futurofobia es pensar que nada de lo que puedas hacer cambiará las cosas. ¿Para qué pelear si todas las luchas están condenadas al fracaso?

Pero es que nuestro pensamiento genera profecías autocumplidas, y si consideramos que dentro de diez años viviremos peor, que la vida será una competición salvaje por los trabajos y los recursos y que el ser humano es absolutamente egoísta y estúpido por naturaleza, si consideramos que lo que se avecina es el apocalipsis, si dejamos de creer en la política, en el arte y en el amor, es muy probable que terminemos viviendo precisamente en esa clase de mundo. Necesitamos imaginación y capacidad para idear alternativas

Futurofobia: una generación atrapada entre la nostalgia y el apocalipsis es un análisis de cómo hemos llegado hasta aquí y también una invitación a cambiar el rumbo, porque el futuro sí está en nuestras manos y podemos reescribir nuestra historia.


Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Categorías

Archivos

¿Qué estás leyendo?

… la justicia, no es solo cuestión de fondo. Sobre todo, es cuestión de forma. Así que no respetar las formas de la justicia es lo mismo que no respetar la justicia. Lo comprende, ¿verdad? -Melchor no dice nada; el subinspector esboza una sonrisa tolerante-. Bueno, ya lo comprenderá. Pero acuérdese de lo que le digo, Marín: la justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.

Terra alta / Javier Cercas

Todo en nuestra web