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Ötzi, el hombre de hielo

MEDIATECA, Apuntes de cine

Ötzi, el hombre de hielo

Una rareza cinematográfica

Esta semana os ofrecemos el contrapunto a las películas comentadas en anteriores entregas en el Blog. Estoy buscando temáticas y tratamientos narrativos diferentes, con el objetivo de contrastar los films seleccionados. Con “Ötzi, el hombre de hielo” pretendo mostrar una forma de hacer cine que escasea en el mercado cinematográfico actual, en el que abundan las grandes superproducciones, o las películas con argumentos sin interés o excesivamente comerciales, que acabarán siendo olvidadas en poco tiempo. De la mano de un director de cine casi primerizo Felix Randau, nos adentramos en una historia original y rigurosa que está muy bien narrada. Además, se puede decir que es una auténtica rareza cinematográfica. El relato está elaborado sin estridencias ni exageraciones, hecho a base de pequeños detalles y teniendo como pautas la sencillez y la naturalidad. “Ötzi, el hombre de hielo” tiene un mensaje nítido de supervivencia y venganza, y a cuyo personaje principal le podríamos denominar como “El renacido europeo”, en recuerdo del film “El renacido” de Alejandro González Iñarritu. El film pone el foco en unos acontecimientos que ocurrieron en los Alpes hace más de 5.000 años, y que salen a la luz tras el hallazgo de un cuerpo momificado en la nieve realizado por dos alpinistas a unos 3.000 metros de altitud. La historia se construye a partir de este descubrimiento casual.

 

Algunas consideraciones

Esta rareza de película es muy bienvenida. Ötzi, el hombre del hielo ha sido un viento de aire fresco, que demuestra que para hacer buen cine no se necesita de grandes presupuestos, ni de actores famosos, sino de un tema interesante, de un tratamiento fílmico riguroso y original.

Destacar la meticulosidad empleada en la grabación de las distintas secuencias, con una fotografía espectacular realizada en tonos fríos, entre grises y blancos. Además, han dedicado especial cuidado a la ambientación, para representar la crudeza del clima de la alta montaña, lo agreste del paisaje, con la recreación exacta de los sonidos de la naturaleza, todo ello envuelve a la trama de un halo de realismo, dramatismo y misterio difícil de superar. Sin olvidarnos que los personajes no utilizan lenguaje, sino unos sonidos aproximados a lo que se supone que empleaban, dándole un toque de realismo y fidelidad histórica. El actor Jürgen Vogel asombra por su presencia física que da fuerza al personaje principal de Kelab.

Felix Randau es el artífice como director y guionista de esta magnífica coproducción entre Alemania, Italia y Austria. Randau nació en Alemania, donde se graduó como director cinematográfico, ha realizado 3 películas y una serie de televisión. Siendo Ötzi, el hombre del hielo la más destacada de su corta producción, habiendo tenido una magnífica acogida entre la crítica.

 

La verdadera historia

Como complemento a la película, no está mal comentar algunas cuestiones interesantes que dan luz sobre este apasionante descubrimiento del “Hombre de hielo”, sobre como era su cotidianidad en el asentamiento y las penalidades que padeció después, cuando tuvo que realizar una travesía obligado por unos acontecimientos inesperados y violentos.

Ötzi, el hombre de hielo, también conocido como Hombre de Hauslabjoch, hace referencia al lugar en el que fue hallado, en plenos Alpes a algo más de 3.000 metros de altura, en la frontera entre Austria e Italia. Por las pruebas de laboratorio realizadas se cree que falleció sobre el 3.200 a. c., tenía algo más de 40 años de edad. Siendo la momia más antigua encontrada en Europa, y es anterior a las momias egipcias. Pertenecía a la cultura  Calcolítica, como lo corroboran los objetos que le acompañaban, hechos de cobre y pedernal.

Por otros estudios realizados se sabe algunas curiosidades, lo qué comió en las últimas horas, y en que época del año falleció.  En su estómago se encontró carne de ciervo, restos de cereales, semillas de endrino y algunas raíces, que comería unas ocho horas antes de morir. Por el polen encontrado en su vestimenta, se sabe también que moriría a finales de primavera o principios de verano.

 

FOTOGRAMAS.  Unas pinceladas

Ötzi, el hombre del hielo. Un lugar, un descubrimiento, una pequeña comunidad y una extraordinaria epopeya.

En los Alpes Ötzial dos alpinistas de Nuremberg encontraron una momia que había quedado al descubierto en la nieve, se pensó al principio que era de algún alpinista, pero este cuerpo congelado tenía una antigüedad de 5.300 años.

Ötzi, el hombre del hielo de nombre “Kelab”, formaba parte de un clan de la edad del cobre, que estaba asentado en los Alpes Ötzial. En este lugar vivía rodeado de su esposa e hijos que habitaban en chozas formando una pequeña comunidad, además disponían de algunos animales y plantas.

“Kelab” era además el guardián del santuario sagrado.

Un día, mientras Kelab se marcha de caza, el asentamiento es atacado en su ausencia, siendo brutalmente asesinados los miembros de la tribu, incluyendo su mujer y su hijo.

Además de la destrucción del poblado, es robado el santuario, siendo un bebé el único superviviente.

Kelab se lleva a su hijo recién nacido con él e inicia una auténtica odisea. Cegado por el dolor y la ira emprende un largo y duro viaje, con el único propósito de buscar venganza persiguiendo a los asesinos, y todo ello dentro de una Naturaleza inhóspita de alta montaña.

Os hemos dado unas pinceladas, la trama no ha hecho más que empezar, tenéis hora y media para acompañar a Kelab en una interesante y arriesgada travesía entre agrestes montañas nevadas.

https://youtu.be/giIAmO9oRt8

 

La puedes encontrar en el catálogo de la Biblioteca de la Universidad de Alicante (BUA):


4 Comments

  1. Buenos días donde se encuentra el linck para ver la pelicula? porque entro al catalogo de la biblioteca y no la encuentro

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… la justicia, no es solo cuestión de fondo. Sobre todo, es cuestión de forma. Así que no respetar las formas de la justicia es lo mismo que no respetar la justicia. Lo comprende, ¿verdad? -Melchor no dice nada; el subinspector esboza una sonrisa tolerante-. Bueno, ya lo comprenderá. Pero acuérdese de lo que le digo, Marín: la justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.

Terra alta / Javier Cercas

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