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The Wonderland (2019)

MEDIATECA, Apuntes de cine

The Wonderland (2019)

En busca de un mundo mejor

Las películas de animación no son un género cinematográfico que vaya dirigido exclusivamente al público infantil, sino que, dependiendo de su argumento y de la forma de desarrollarse, pueden ir dedicadas a un público más amplio, este es el caso de The Wonderland. La animación suele dar a las historias una dimensión distinta, en la que se puede jugar de forma más abierta, libre y creativa.

“Nuestro mundo está perdiendo los colores…”

¡Sí, así parece ser!, en esta película con un título corto, que a su vez es sugerente, “The Wonderland”, posee una trama algo compleja, y con un mensaje con marcados matices ecologistas. Este film de animación japonés recuerda bastante al estilo de la factoría Ghibli, y al del maestro Hayao Miyazaki, aunque por supuesto está a distancia de él, ya que Miyazaki es irrepetible. En la forma y en el contenido, este anime está realizado con ese estilo japonés que tanto gusta en Occidente. Su director Keiichi Hara ha creado un universo muy particular y que debe mucho a la novela de Lewis Carroll “Alicia en el país de las maravillas”, ya que hasta en el título hace referencia a él. The Wonderland es una escapada a un mundo lejano, y que a la vez está próximo, ya que se halla situado al otro lado del espejo, una auténtica aventura en busca de un tesoro escondido.

 

Keiichi Hara

Nacido a finales de los años cincuenta, este guionista y director japonés, ha realizado casi una veintena de películas, entre cortos, trabajos para televisión y series. Destacan en su filmografía, la serie para televisión “Shin Chan”, en la que participa como codirector. Es una entretenida e interminable serie de más de mil episodios, que narra las aventuras de un niño travieso de cinco años de edad. Después vinieron varios largos sobre el mismo personaje, hasta la producción de El verano de Coo, en el que cambia la temática de sus historias; luego le siguieron Colorful,  Miss Hokusai, y su última cinta The Wonderland.

Keiichi Hara tiene una gran habilidad para crear nuevos mundos, para dibujar otros universos. En The Wonderland se muestra una historia fantástica que tiene un claro mensaje de protección del medio ambiente, y en la que luchan dos mundos contrapuestos y enfrentados, el bien contra el mal, un mundo de luz contra otro de oscuridad. La historia está contada con un buen ritmo, y no se hace larga, a pesar de las casi dos horas de duración. Destacar también la estética del dibujo y los tonos y colores empleados, con los que crea un universo fantástico. Los personajes principales están bien perfilados, dan a la historia relieve y credibilidad.

 

FOTOGRAMAS.  Unas pinceladas

The Wonderland, un cuento que nos hace viajar a un mundo paralelo de la mano de sus protagonistas.

Akane es la protagonista principal, una chica normal y algo tímida, que vive con su madre. El día antes de su cumpleaños, a instancias de la madre, realiza una visita a la tienda de antigüedades de su tía Chii.

Allí, de repente, descubren ambas, con gran asombro y estupor, a un personaje desconocido, que aparece de repente bajo la puerta de madera que va al sótano de la tienda.

Después de seguir a este misterioso personaje, pasan como a otra dimensión, a un mundo paralelo que se encuentra al otro lado del sótano de la tienda…

Este extraño personaje se llama Hippocrates, y es alquimista; le acompaña Pipo, un aventajado estudiante.

Hippocrates desea que le acompañen en una importante misión, que tiene como objetivo salvar a un mundo que se encuentra amenazado de sufrir grandes catástrofes…

En seguida ponen rumbo hacia el “País de las maravillas”.

“Queremos que salves a nuestro mundo, ya que está perdiendo los colores”

Allí hay una amenaza que es consecuencia de la industrialización, y está influyendo negativamente en el país.

Dos oscuros personajes son los causantes de esta contaminación, ya que están produciendo una gran cantidad de acero para la industria.

Solo la “Diosa del viento verde” puede ser capaz de salvar de la catástrofe que se avecina, y de que el “País de las maravillas” pueda recobrar su esplendoroso colorido anterior…

¿Lo conseguirán?

 

 

La puedes encontrar en el catálogo de la Biblioteca de la Universidad de Alicante (BUA):


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… la justicia, no es solo cuestión de fondo. Sobre todo, es cuestión de forma. Así que no respetar las formas de la justicia es lo mismo que no respetar la justicia. Lo comprende, ¿verdad? -Melchor no dice nada; el subinspector esboza una sonrisa tolerante-. Bueno, ya lo comprenderá. Pero acuérdese de lo que le digo, Marín: la justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.

Terra alta / Javier Cercas

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